Has tenido tiempo de mentalizarte: van a bajar drásticamente los límites de velocidad en ciudad para reducir el número de atropellos y muertes en ciudad. Si aún no te habías enterado, te lo contamos ahora detenidamente: estos límites de velocidad en todas las urbes españolas, con las multas que implican rebasarlos, entran en vigor este martes 11 de mayo, justo un par de días después de que se acaba el estado de alarma.
Con la entrada en vigor de la norma, vienen de la mano las subsiguientes multas que vendrán aparejadas al hecho de no respetar estos límites, así que no te distraigas ni un segundo al volante, porque puedes liarla muy parda sin tener que viajar o salir de tu propia ciudad.
Entre las novedades de la nueva Ley de Tráfico, que ya hemos hablado aquí de ellas largo y tendido, la variación de los límites de velocidad va a ser una de las piedras angulares de este casi faraónico proyecto. En el Artículo 50 del Reglamento General de Circulación se establecen los nuevos límites para la circulación en ciudad. Así, por norma, la velocidad máxima en las vías urbanas que tengan un único carril por cada sentido de circulación – la mayoría- pasan a tener un límite de velocidad de 30 km/h.
Este límite varía en dos casos. Será menor, de sólo 20 km/h, cuando la calle posea una plataforma única de calzada y acera. Sin embargo, el límite será de 50 km/h si la calle tiene dos o más carriles en cada sentido.
Lo bueno de todo esto es que ya ha habido ciudades que han hecho pruebas con los nuevos límites de velocidad. Estas ciudades pioneras empiezan a arrojar datos al respecto que no son nada esperanzadores. El ejemplo más claro es Bilbao. Allí se ha controlando sin sancionar aún, la velocidad en distintas calles, y 8 de cada 10 conductores circulan por encima del límite establecido. El ejemplo de Bilbao sirve para una veintena más de ciudades que ya están controlando la velocidad con el límite a 30 km/h, entre ellas, Madrid, Barcelona, Zaragoza, Málaga o Murcia, por citar algunas de las más grandes.
Hasta que no leamos el texto completo de la norma que entra en vigor este mismo 11 de mayo no sabremos si las multas y la detracción de puntos se van a endurecer aún más, pero lo que está claro es que, tal y como están ahora, ya son bastantes persuasoras, dado que la velocidad máxima es muy baja con respecto a carreteras fuera de ciudad, donde el límite puede llegar a 120 km/h.
Ahora mismo, si en una calle donde la velocidad máxima permitida son 30 km/h vas a 55 km/h, por poner un ejemplo, puede pasar en un despiste o cuando vas con prisas a llevar los niños al cole, etcétera, la multa será de 300 euros y dos puntos del carnet. Si el despiste es mayúsculo, y te pillan a 81 km/h en la misma zona de 30 km/h, ojo porque nos vamos a 600 euros de multa y 6 puntos de carnet, ya que estaríamos hablando de una infracción Muy Grave.
Lo más importante es que vayas pensando, rapidito, en rebajar considerablemente la velocidad cuando conduces en ciudad, porque tu bolsillo te lo va a agradecer, amén de conservar los puntos de tu carnet de conducir, que con un par de errores/despistes, pueden volar y verte abocado a estar una temporada sin conducir y tener que realizar algún curso de recuperación de puntos de la DGT, en el mejor de los casos.
Y para esta nuevo límite de velocidad, ya conocemos los distintos radares, específicos, que van a utilizarse para vigilar que la norma se cumpla. A partir de ahora los vocablos TruCAM y TruCAM II van a ser más conocidos, pues así se llaman los radares especializados en detectar las infracciones a estas velocidades, más bajas de lo habitual. Se trata de un radar de medidas compactas, pequeño y manejable, se puede colocar sobre un trípode, camuflado dentro de un coche, o incluso adherido a una moto, una farola, una valla metálica, etcétera.
A pesar de sus características, casi de bolsillo, estos radares de nueva generación pueden controlar, incluso, dos carriles a la vez. También son capaces estos nuevos cinemómetros de hacer tres mediciones por segundo y detectar velocidades de hasta 320 km/h. Lo más alucinante es que sólo tiene un margen de error de 2 km/h y puede estar activo hasta ocho horas. A la última, cuentan con pantalla táctil y filtro de luz nocturna.
Si aún no te has dado cuenta de que esto va en serio, más vale que vayas pensando en levantar el pie del acelerador en ciudad, porque las multas van a ir acorde a la velocidad a la que te pillen.