"K.I.T.T, ven a recogerme". Seguro que has escuchado más de una vez estas palabras en boca de David Hasselhoff, Michael Knight en 'El coche fantástico' (1982). KI.T.T siempre acudía a la llamada de su dueño por el reloj, aunque supiese que lo iban a llevar por caminos angostos, saltos imposibles o persecuciones peligrosas. También era común escuchar al automóvil intentar disuadir a Knight de sus peripecias. "Michael, no irás a hacer eso", "no te lo recomiendo", "Michael, ¿estás seguro?".
Sin embargo, Knight siempre terminaba haciendo lo que tuviera que hacer para establecer el orden. Cuando se cumplen 35 años de la última emisión (1986), Hasselhoff ha puesto en subasta al que fue su fiel compañero. El coche funciona a la perfección y ya hay precio estimado: rondará el millón de dólares y lo entregará el propio Hasselhoff en persona, debido a una cláusula especial incluida en la subasta.
En colaboración con la empresa de subastas Live Auctioneers, Hasselhoff ha decidido deshacerse de uno de los automóviles más famosos de la historia del cine -en competencia con el DeLorean de 'Regreso al Futuro'-. Se trata del incombustible Pontiac Firebird Trans Am con modificaciones. En la página web de la subasta puedes comprobar a qué precio se venderá y algunas de las prestaciones que incluirá el icónico coche.
Según la empresa, el coche es funcional y está listo para lanzarse a la carretera. Hay que destacar que no es el mismo que fue utilizado en la producción televisiva. Actualmente se encuentra en el Reino Unido pendiente de ser enviado al ganador de la puja. Hasta el momento, la puja máxima se ha establecido muy cerca del millón de dólares. Hay además una cláusula que debe ser tenida en cuenta, detallada en el anuncio: "si el precio excede el 25 % por encima del precio de salida, Hoff entregará personalmente el coche al nuevo propietario".
Obviamente, el coche no tiene las funciones vinculadas a la inteligencia artifical, pero guarda toda la esencia en sus características estéticas. Es totalmente negro y la carrocería es de fibra de vidrio. Las llantas son también negras e incluye la clásica luz roja que tantas veces vimos en televisión. El motor es un V8 de 5,7 litros y cambio automático de cuatro velocidades.
Por su parte, si entramos dentro del coche, nos encontraremos con el panel futurista por el que se comunicaba K.I.T.T y con el volante sin arco, marcado con el emblema de Knight Industries Thousand (es decir, la empresa ficticia a través de la cual Knight imponía la ley). También hay que destacar que se ha guardado, de la misma forma, el color beige que caracterizaba al vehículo en la serie
Además del coche, la empresa está subastando otros objetos preciados de la serie, como algunos guiones originales de la serie, muñecos, prendas de vestir, la chaqueta personal de Planet Hollywood London de 1993 o una cita con el propio Hasselhoff. Todo ello lo podemos encontrar en la web de Live Auctioneers, que cada poco tiempo incluye un nuevo objeto de la serie. Los motivos de esta liquidación, sin embargo, no han trascendido.