Es bien sabido que empezar el día haciendo deporte nos aporta un extra de energía a lo largo de la jornada, además mejora nuestro humor y reduce los niveles de estrés y ansiedad. Entre los beneficios que nos aporta, mejora la circulación de la sangre, oxigena los tejidos y elimina tensiones por lo que es un buen método para aliviar dolores de cabeza y musculares. Por ello, Paula Butragueño, entrenadora y Nike Master Trainer, ha diseñado una nueva rutina de ejercicios para hacer nada más despertarnos, sin necesidad de movernos de la cama. Te lo contamos.
Se trata de tres bloques de 10 minutos cada uno que puedes realizar juntos o por separado, compuestos por ejercicios de bajo impacto. “El método Bed Up! nos enseña a disfrutar de nuestro cuerpo, a prepararnos para el día y, sobre todo, darnos lo que necesitamos desde el primer momento del día. Con este programa es más fácil que nunca hacer ejercicio. Desde la cama, un lugar donde todos nos sentimos cómodos, y desde el que descubrir nuestro potencial para ir convirtiendo poco a poco la actividad física y el cuidado mental en un hábito diario”, afirma la creadora.
Durante la rutina se trabaja la movilidad, la activación y estiramientos de todo el cuerpo, con una parte final dinámica. El primer bloque está compuesto por una serie de ejercicios de calentamiento que nos ayudará a evitar lesiones y daños articulares. Esta parte se hace tumbado sobre el colchón y respirando profundamente, trabajando la movilidad articular y la flexibilidad de brazos y piernas. Los movimientos y las posturas son muy similares a las que se realizan en clases de yoga o pilates.
Para continuar, los siguientes 10 minutos se dedican a trabajar los músculos del core, es decir, del tronco, con estiramientos profundos de columna y piernas en los que fortaleceremos el abdomen, los oblicuos, el diafragma y el suelo pélvico, tan importante a medida que cumplimos años. Una vez conseguidos estos dos pasos, es el turno de la tercera parte del entrenamiento, la activación dinámica de piernas y glúteos a través de ejercicios de tríceps, sentadillas o saltos que se van realizando a ritmo lento y con una profundidad que va en aumento a medida que los músculos se van calentando. La idea de esta parte es que a medida que el cuerpo lo vaya permitiendo se vaya aumentando la intensidad para ir superándonos poco a poco.