Leo Messi por fin consiguió su anhelada Copa del Mundo en el estadio Lusail de Qatar, y lo hizo arropado por su madre, su mujer y sus hijos, que no quisieron perderse un día tan especial para el astro argentino. "Ya está", les dijo a pie de campo tras fundirse en un gran abrazo con ellos después de más de 120 minutos de infarto. Quedan ahora las celebraciones oficiales y el regreso a Argentina, donde 'La Pulga' festejará más en la intimidad la victoria más deseada, rodeado de su círculo más cercano, ese en el que siempre se ha apoyado, tanto en los buenos como en los malos momentos. Lo repasamos.
Si alguien ha sido totalmente decisivo en la carrera del exazulgrana es Jorge Horacio Messi, su padre y agente, la persona que se encarga de sus negocios y sus ingresos. “Desde que comenzó la carrera de mi hijo, siempre traté de facilitarle la vida. Él jugaba al fútbol y yo de buena manera le acompañaba”, así describía su labor el padre del astro cuando acusaron al exjugador del Barcelona de fraude a Hacienda para exculparle de toda responsabilidad. "Sé el chino básico, entiendo lo justo de fiscalidad", se justificaba también a sí mismo.
Cuando en 2001 se le diagnosticó a su hijo una enfermedad hormonal con un tratamiento carísimo, no dudó en aceptar la oferta del Barça y mudarse a la Ciudad Condal con él, permaneciendo a su lado en todo momento. Y así ha sido desde entonces, convertido en la voz de Leo para todos los asuntos que no tienen que ver estrictamente con la pelota, negociando los contratos millonarios que ha ido firmando su hijo.
Por el contraro, Celia María Cuccittini, la madre, siempre ha permanecido en un segundo plano, pero en Qatar ha estado apoyando a su hijo y no dudó en saltar al césped y fundirse con él en un conmovedor abrazo tras conseguir la victoria. Es una mujer sencilla, de 62 años, que contra todo pronóstico se ha convertido en una celebridad en Argentina, donde los medios suelen llamarla para que opine de cualquier cosa. A veces cede e incluso habla. Como su marido, lo dejó todo para acompañar a Messi a Barcelona, pero la pequeña e única hija, Mariasol, no logró adaptarse a la ciudad , y la madre volvió a Rosario con sus hijos.
Además de Mariasol, Messi tiene otros dos hermanos que le idolatran: Rodrigo y Matías. El primero, apasionado y temperamental, empezó de camarero en Barcelona y hoy es un empresario con vínculos con los negocios de su hermano. El segundo vive en General Lagos, cerca de Rosario, y siempre ha sido el rebelde de la familia. Ha estado implicado en algunos sucesos controvertidos que le llevaron incluso a ser detenido. Mariasol, la benjamina, es muy activa en las redes sociales, donde es una especie de narradora de la vida familiar de los Messi. Participó incluso en el lanzamiento de una línea de ropa inspirada en el jugador.
Pero sin duda, el mayor pilar en la vida de Leo es su esposa Antonela Roccuzzo, su novia desde siempre. "Nos conocemos hace muchísimo tiempo, me conoce a la perfección, sabe cómo entrarme a cada momento y sobre todo en los malos. Es una persona que prácticamente no tiene días malos, que siempre está de buen humor", dijo. Su boda, en junio de 2017 en Rosario, fue un acontecimiento en el país.
Anto, como la llaman sus amigos, tiene gran influencia en las decisiones que toma el 10, tanto vitales como profesionales. Una de sus amigas más cercanas es Sofía Balbi, mujer de Luis Suárez -íntimo de Messi-, con quien fundó incluso una tienda de zapatos que no funcionó. La pareja tiene tres hijos: Thiago, que nació en el 2012, Mateo, que llegó al mundo en el 2015 y por último Ciro, que va a cumplir cinco años.
Messi ha confesado en alguna ocasión que tiene pocas amistades cercanas en las que confía y que su circulo íntimo es pequeño. "Tengo pocos amigos de verdad. Después siempre me refugié mucho en mi familia, que es lo más importante y donde yo me siento feliz, estando con ellos, con mis amigos, y no necesito mucho más”, asegura.