Los dolores en las articulaciones nunca son bien recibidos y los de rodilla, aunque parezca que no, son de lo más desagradables. En ocasiones surgen por algún problema o desgaste, así como por algún mal gesto haciendo deporte que termina en una serie de dolores que te impiden mover con soltura la pierna e incluso dormir y descansar como desearías. Ante esta situación, el osteópata Julien Lepretre, autor del libro 'Moverse sin dolor', da tres ejercicios sencillos que se pueden realizar en casa sin materiales específicos que pueden serte de ayuda para aliviar el dolor de rodilla que te trae por el camino de la amargura.
Es un ejercicio que puede aliviar los dolores de rodillas a través de una leve descompresión articular. Hay que enrollar una pequeña toalla y ponerse de rodillas y colocar la toalla detrás de la rodilla. Sentarse progresivamente hasta sentir una descompresión en la rodilla. Eso sí, hay que parar antes de sentir un dolor. Se puede sostener la posición de 5 a 10 segundos y subir. Repetir de tres a cinco veces.
El tibial anterior es un músculo que solemos olvidar, sin embargo es esencial para el buen equilibrio del tobillo y de la rodilla. Les propongo un ejercicio para fortalecerlo. Apoyarse de espalda contra una pared. Adelantar los pies a unos 30 centímetros de la pared, elevar la punta de los pies lo más alto posible y sostener la posición 10 segundos. Repetir cinco veces.
A menudo, los dolores de rodilla son compensaciones de una falta de resistencia en los músculos estabilizadores de la cadera como los glúteos medio y menor. Es lo que vamos a trabajar con este ejercicio. Además de ayudar con los problemas de rodilla, es muy bueno para la salud de las caderas. Ponerse en equilibrio sobre una pierna, levemente doblada. Luego alejar la rodilla de la otra pierna hacia fuera y regresar. Mantener la espalda recta durante el movimiento. Repetir de 10 a 15 veces con cada pierna en tres series. Se puede agregar una banda elástica por encima de las rodillas para aumentar la intensidad.