La próstata es una glándula que pertenece al sistema reproductor masculino y que tiene la función de producir y almacenar el líquido que forma parte del semen, y también uno de los órganos que más se ven afectados por las enfermedades. De hecho, según la Asociación Española de Urología (AEU), las patologías de la próstata se sitúan entre las enfermedades más frecuentes entre los varones de más de 50 años.
Dada la prevalencia de este tipo de enfermedades, resulta vital que los hombres conozcan los síntomas de estas afecciones y acudan de manera periódica al urólogo para que puedan ser sometidos a exámenes y revisiones que puedan detectar los problemas relacionados con esta glándula. La detección precoz juega un papel fundamental en el diagnóstico de muchas enfermedades relacionadas con la próstata, pero, aun así, son muy pocos los hombres que se someten a revisiones anuales.
De acuerdo a la AEU, solo un 20% de los varones de nuestro país pasa por este tipo de exámenes, una cifra muy preocupante si se tiene en cuenta que una de las enfermedades con mayor prevalencia entre los hombres es el cáncer de próstata, una enfermedad que se sitúa entre los tipos de cáncer más comunes de España, por detrás del de colon y recto, el de mama y el de pulmón.
Aunque no haya una edad mínima para acudir al urólogo por primera vez, los expertos recomiendan que, como muy tarde, se acuda al especialista cuando se alcanza una edad comprendida entre los 40 y los 50 años, ya que es en esta edad cuando se empiezan a desarrollar algunas patologías relacionadas con el envejecimiento. En el caso de las personas con antecedentes familiares u otros factores de riesgo, no obstante, es recomendable acudir lo más pronto posible y realizar revisiones periódicas para poder detectar posibles enfermedades lo más pronto posible.
Dentro de las enfermedades de la próstata, hay tres que tienen una mayor prevalencia que otras: la prostatitis, la hiperplasia benigna de próstata y el ya mencionado cáncer de próstata.
La prostatitis es una infección aguda de la próstata provocada por ciertas bacterias que, por norma general, llegan a la próstata por la vía uretral. Esta enfermedad puede provocar fiebre y dolor al orinar, así como dolor en la zona baja del abdomen y la zona perineal, entre otros síntomas, y requiere tratamiento antibiótico.
La hiperplasia benigna, por su parte, es el crecimiento benigno de la glándula prostática, que aparece con el envejecimiento. Al incrementar de tamaño, la próstata puede obstruir la salida de orina, provocando dificultades para iniciar la micción o la urgencia miccional, entre otros.
Finalmente, el cáncer de próstata es un tumor de gran prevalencia en España, donde desde el SEOM calculan que en este 2022 se han diagnosticado cerca de 31.000 casos. Este cáncer afecta, generalmente, a los hombres de más de 65 años y en un primer momento es asintomático. Por eso, es importante realizar revisiones periódicas para comprobar que todo sigue en orden.