Los superalimentos son una serie de alimentos muy completos desde el punto de vista nutricional que sobresalen sobre los demás por la gran cantidad de beneficios que pueden llegar a aportar a nuestro organismo si se combinan con unos hábitos saludables.
Estos alimentos, que en los últimos años han ganado una enorme popularidad, presentan una elevada concentración de nutrientes, de antioxidantes, de grasas saludables o vitaminas, y en combinación con una dieta sana y equilibrada y la realización de ejercicio físico pueden ayudar a reducir el riesgo de padecer diversas patologías, como la diabetes, algunas enfermedades cardíacas o algunos tipos de cáncer, entre otros.
Dentro de este grupo de alimentos podemos encontrar algunos tan tradicionales y típicos como la coliflor, pero también otras especies mucho más exóticas que en los últimos años han ganado presencia en nuestros supermercados, como el aguacate o el ginseng, una planta que en nuestro país tal vez no goce de la fama del oro verde pero que fuera de nuestras fronteras se suele utilizar como un remedio natural.
El ginseng es, básicamente, una planta medicinal que se ha utilizado durante siglos en la medicina tradicional china y coreana y que hoy en día aún sigue utilizándose como un remedio natural gracias a los múltiples beneficios que puede aportar al organismo.
Originaria del noroeste de Asia, este superalimento tiene como principal activo los ginsenósidos, un compuesto químico natural con propiedades antiinflamatorias, antioxidantes, antiapoptóticas (previene la muerte celular) y estimulantes, y es rico en vitaminas B1, B2 y D, en aminoácidos, en aceites esenciales, minerales como el zinc y en estrógenos.
Conocido como “el remedio para todas las enfermedades”, el ginseng puede encontrarse en distintas variedades, aunque las más populares son el ginseng asiático o coreano, el ginseng americano y el ginseng siberiano, que cuenta con la particularidad de no contener ginsenósidos.
Los beneficios que esta planta medicinal puede aportar a nuestro organismo son muy variados. A pesar de que la investigación sobre el ginseng aún es limitada, diversos estudios apuntan a que este superalimento podría ayudar a mejorar la función sexual de los hombres, ya que, gracias a su alto contenido en ginsenósidos, ayudaría a combatir tanto la disfunción eréctil contra la eyaculación. Además, desde el punto de vista femennino, esta planta también podría ayudar a mejorar la líbido y excitación en las mujeres.
Más allá de los beneficios que esta podría ofrecernos en los asuntos de cama, el ginseng también ayudaría a combatir los problemas de estrés, ya que, según las investigaciones, esta planta podría aumentar la resistencia a los factores estresantes y a prevenir estados de ánimo como la depresión o la ansiedad.
Asimismo, el ginseng también puede estimular la capacidad intelectual y el rendimiento cognitivo y mejorar las funciones cerebrales, como la memoria o la capacidad de comprensión. De igual manera, este superalimento también puede fortalecer el sistema inmunitario, cuidar el corazón, disminuir el colesterol e incluso favorecer el rendimiento deportivo. En definitiva, un alimento bien cargado de beneficios que podríamos incluir en nuestra dieta, aunque, eso sí, con un uso moderado, ya que, de lo contrario, podríamos sufrir algún efecto secundario, como dolores de cabeza, náuseas o hasta reacciones alérgicas.