Gafas reticulares y otros juguetes para hacer ejercicio con los ojos: "Funcionan"

En un mundo donde pasamos horas mirando pantallas, la salud de nuestros ojos es más crucial que nunca. Cuando lees o trabajas con pantallas, utilizas tus ojos de una manera muy específica y repetitiva que puede terminar afectando gravemente a nuestra vista. Las gafas reticulares, junto con otros juguetes y herramientas, son soluciones sencillas y poco conocidas para ayudarnos a ejercitar nuestros ojos y mejorar nuestra visión. ¿Cómo funcionan?

La doctora Ainhoa de Federico, especialista en visión natural, profesora investigadora de la Universidad de Toulouse y creadora del Método Volver a ver claro, nos propone cinco juguetes y herramientas para cuidar tus ojos y ejercitarlos para ver mejor:

Gafas reticulares

Estas gafas, también conocidas como gafas estenopeicas, se caracterizan por tener una serie de pequeños orificios. Al limitar la cantidad de luz que entra al ojo, activan la visión foveal, que es nuestra visión de mayor calidad. Te recomendamos tener en cuenta las siguientes indicaciones de uso:

  • Pueden utilizarse para la lectura, el trabajo con pantallas, como sustituto de las gafas de sol en la playa y para muchas otras actividades en entornos donde no necesitemos tener visión periférica. 
  • No deben utilizarse para actividades como conducir, hacer deporte en el exterior para loas que se requiere una buena visión periférica o si hay poca luz.
  • Se recomienda usarlas hasta dos horas al día, seguido o repartido en diferentes momentos.

Además de ofrecer una nitidez inmediata en muchos casos, también entrenan los ojos para que adquieran mejores hábitos de visión como la conciencia foveal y los movimientos sacádicos, y vean mejor incluso cuando no se estén usando.

Cuerda de Brock

Se trata de un cordón con bolas de distintos colores y permite estimular la visión para mantenerla en forma. Puedes hacértela casera, colocando pinzas de colores en lugar de las bolas. Esta es la manera de utilizarla:

  • Sujeta la cuerda con los brazos o atada al pomo de una puerta o a una estantería para hacerla más larga. Si lo haces con otra persona cada una puede sostener un extremo a nivel de su nariz.
  • Colócale tantas pinzas de la ropa como quieras. Si están pintadas de colores es mejor.
  • Sujeta la cuerda cerca de tu nariz y mira la pinza más lejana, luego la siguiente, y así sucesivamente hasta llegar a la más cercana.
  • También puedes quitar las pinzas de la ropa y recorrer con tu mirada la cuerda desde el extremo más lejano hasta el más cercano, de forma continua.
  • A medida que tu mirada recorre la cuerda, observarás un cruce y una cuerda doble. Si miras al extremo lejano verás la forma de una A, si miras el extremo cercano verás una V y en puntos del centro de la cuerda, verás como una X que se va moviendo de lugar.
  • Alterna entre mirar de cerca y de lejos varias veces y observarás cómo mejora tu convergencia de cerca.

El motivo por el que ves dos cuerdas que se cruzan en un punto es porque cada ojo ve una imagen levemente diferente de la cuerda, porque hay una distancia entre ambos ojos y el lugar donde la cuerda se “cruza”. Entonces vemos solamente una, es el punto que estamos enfocando en ese momento. El objetivo de los juegos con la cuerda de Brock consiste en aprender a mantener una buena coordinación binocular, ejercitando la convergencia y la fusión cerebral de la imagen. Con esta práctica descubrirás que ponerse bizco no solo es inofensivo, sino también beneficioso como ejercicio.

Marionetas de dedo

Puedes hacer estos ejercicios de estiramiento ocular siguiendo simplemente los movimientos de tus dedos con los ojos, pero si utilizas marionetas de dedo, estimularás aún más tus ojos y tu visión al querer fijarte en los detalles de las divertidas marionetas. Sigue estos pasos:

  • Mueve lentamente un dedo hacia arriba y hacia abajo de 3 a 5 veces y síguelo con la mirada.
  • Mueve lentamente un dedo a la izquierda y a la derecha de 3 a 5 veces y síguelo con los ojos.
  • Mueve lentamente un dedo en diagonal (arriba a la derecha, abajo a la izquierda, arriba a la izquierda y abajo a la derecha) de 3 a 5 veces y síguelo con la mirada.
  • Mueve lentamente un dedo en semicírculos, 3 veces por arriba y 3 veces por abajo, y síguelo con los ojos.
  • Mueve lentamente un dedo 3 veces en círculo en el sentido de las agujas del reloj y síguelo con la mirada.

Puedes hacerlo moviendo la cabeza o únicamente los ojos, puedes hacerlo más cerca de tu cara o más lejos y puedes variar la amplitud y la velocidad. Cada ejercicio y su aplicación facilitará la relajación y buen tono de los músculos de los ojos, en cada caso te aportará beneficios diferentes. No hagas un esfuerzo especial por enfocar, pero presta atención a los detalles que te interesen de la marioneta de dedo.

Un post-it

Algo tan sencillo como una nota adhesiva o post-it utilizado a modo de parche te permite practicar ejercicios para estimular cada ojo por separado y posteriormente coordinar mejor tus ojos, lo cual es tanto más importante si tienes un ojo que ve mejor que el otro.

Comienza estimulando el ojo que ve mejor. Para ello, tapa el otro ojo con el parche y haz lo siguiente:

  • Mira de cerca y de lejos un objeto que te resulte interesante, mientras lo mueves de diferentes maneras.
  • Mueve los dedos en el ángulo más amplio en el que puedas seguir percibiéndolos mientras miras al frente.
  • Haz los ejercicios con la cuerda de Brock.
  • Camina por la casa.
  • Lee solo con ese ojo.
  • Al final, cierra los ojos y haz palmeo para integrar la experiencia.

A continuación, haz lo mismo durante el doble de tiempo con el otro ojo, tapando el ojo que ve con más claridad. Seguidamente, repite el proceso con los dos ojos destapados.

Pelotas de colores

Con estos ejercicios podrás mejorar la coordinación ojo-mano-cerebro-cuerpo. Te sirven todas las pelotas de cualquier tamaño, color, peso, textura o material:

  • Con el post-it colocado sobre el entrecejo, pasa la pelota de una mano a otra y síguela con la mirada. Hazlo moviendo la cabeza y otras veces sin moverla, solamente con los ojos. 
  • Prueba un poco de malabarismo con una o varias pelotas. Déjate sorprender y ríete cuando se te caigan.
  • Tápate un ojo con un post-it sobre la ceja y juega a lanzar la pelotita con otras personas durante un rato; repítelo cambiando el post-it de ojo. Si lo haces al aire libre, los beneficios serán aún mayores.

Recomendamos practicar palmeo como descanso entre los diferentes ejercicios, para relajar los ojos e integrar cada experiencia. Estos son los pasos básicos del palmeo:

  • Retira gafas o lentillas si sueles llevarlas.
  • Relaja tus manos, por ejemplo, sacudiéndolas o frotándolas, y colócalas en forma de cucharita.
  • Pon los dedos de una mano sobre los dedos de la otra y colócalos en el centro de tu frente.
  • Con las palmas de las manos, haz oclusión alrededor de las cuencas oculares. Si tienes los ojos abiertos, deberías notar que apenas entra luz.
  • Asegúrate de mantener los ojos cerrados y relajados durante el proceso, sin taparte la nariz. 

Además de practicar el palmeo entre los diferentes ejercicios, recomendamos hacerlo a menudo durante el día y sobre todo antes de dormir.

Al igual que cualquier músculo del cuerpo, los ojos también necesitan ejercicio, y con la ayuda adecuada, podemos asegurarnos de compensar las tensiones a los que los sometemos frecuentemente para que sigan funcionando al máximo de su capacidad. Si lo hacemos de forma divertida es tanto mejor.