Logran curar por primera vez la diabetes de una paciente

Los avances contra la diabetes han logrado un nuevo hito. Una mujer de 25 años con diabetes tipo 1 ha conseguido producir su propia insulina en menos de tres meses después de recibir un trasplante de células madres reprogramadas.

La paciente es así la primera persona diabética que es tratada con células de su propio cuerpo. El trasplante tuvo lugar hace un año y, según explica la revista Nature, la joven lleva ya puede comer todo tipo de alimentos sin sufrir ningún problema metabólico.

Enfermedad superada

James Shapiro, cirujano de trasplantes e investigador de la Universidad de Alberta en Edmonton (Canadá), califica los resultados como sorprendentes al revertirse la diabetes de la paciente por completo. El nuevo trasplante sigue el camino iniciado por un grupo de investigadores de Shanghái, en China, que en abril trasplantaron con éxito islotes productores de insulina en el hígado de un hombre de 59 años con diabetes tipo 2. Los islotes también se produjeron a partir de células madre reprogramadas extraídas del propio cuerpo del hombre. Desde entonces, este paciente ha dejado de tomar insulina.

Todas estas iniciativas forman parte de un grupo de ensayos pioneros que utilizan células madre para tratar la diabetes. Esta enfermedad afecta a casi 500 millones de personas que, además, pueden desarrollar otro tipo de patologías. La mayoría de estos pacientes padecen diabetes tipo 2, en la que el cuerpo no produce suficiente insulina o su capacidad para utilizar la hormona disminuye. El resto tiene diabetes tipo 1, en la que el sistema inmunitario ataca a las células de los islotes del páncreas. Los trasplantes de islotes pueden tratar la enfermedad; sin embargo, no hay suficientes donantes para una demanda creciente. Cuando hay trasplantes, los pacientes tienen que tomar medicamentos inmunosupresores para evitar que el cuerpo rechace el tejido del donante.

Células madre creadas en laboratorio

La ventaja de utilizar en cualquier terapia células madre es que se pueden cultivar las veces que sean necesarias en laboratorio. Por tanto, potencialmente pueden proporcionar una fuente a demanda de tejido pancreático. Al utilizar tejido elaborado a partir de las propias células del paciente, se elimina la posibilidad de rechazo y la necesidad de utilizar inmunosupresores.

En definitiva, los trasplantes que utilizan las propias células del receptor tienen ventajas, pero también inconvenientes: los procedimientos son difíciles de llevar a cabo y de comercializar a gran escala. Como solución intermedia, varios grupos de investigadores han iniciado ensayos con células de islotes creadas a partir de células madre de donantes para trasplantar a los pacientes que demanden esta terapia. Ya se conocen los resultados preliminares de un ensayo, dirigido por Vertex Pharmaceuticals en Boston, en los que 12 participantes con diabetes tipo 1 recibieron islotes derivados de células madre embrionarias de otros donantes que se inyectaron en el hígado. Al no ser células madre propias, todos fueron tratados con inmunosupresores. Meses después del trasplante, todos los participantes comenzaron a producir insulina cuando había glucosa presente en el torrente sanguíneo. Algunos de ellos pudieron dejaron de ser dependientes de la insulina.