Sales a la calle lo justo. Lo haces con guantes y mascarilla. Vuelves con la compra hecha. Te lavas las manos. Te cambias de ropa y guardas todo en el frigorífico o congelador. Pero, ¿tomas las mismas precauciones con los alimentos antes de consumirlos? Pese a que actualmente no hay evidencia de que los alimentos sean una fuente o vía de transmisión del Covid-19, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) está haciendo un seguimiento exhaustivo de la propagación del mismo. Como medida preventiva, algunos organismos oficiales como la OCU, la OMS o la Comunidad de Madrid proponen una limpieza exhaustiva de los productos antes de consumirlos. Te contamos cómo hacerlo.
Como se trata de alimentos que, en muchos casos se consumen sin pelar o crudos, su higiene es fundamental. La recomendación de la Comunidad de Madrid es lavar los vegetales crudos bajo el chorro del grifo. Si vas a comer fruta o verdura cruda con piel, es importante, además, sumergirla 5 minutos en agua potable con lejía de uso alimentario (una cucharada por cada 3 litros de agua) y después acláralas con abundante agua corriente.
Otra opción, si no tienes este producto, es hacerlo con una disolución de vinagre y agua. En este caso los alimentos deben estar, en lugar de cinco, diez minutos y posteriormente aclararlos. Si hablamos de vegetales de cáscara dura, como puede ser el melón o el pepino, también conviene frotarlos con un cepillo. "Frota la piel para eliminar una mayor cantidad de residuos y otros posibles contaminantes, siempre y cuando la superficie de la fruta o vegetal lo permita, como por ejemplo en el caso de manzanas, peras o calabacines", aconsejan desde la OCU. Si se trata de vegetales de hojas, siempre retirar las externas y desecharlas.
En el caso de productos que se vayan a pelar, es importante lavarlos antes de hacerlo, como también los cuchillos o utensilios que se vayan a emplear para ello. Desinfectar la superficie con agua y jabón, y lavarse bien las manos antes de manipularlos, es la regla básica a seguir.
Desde la Comunidad de Madrid recomiendan cocinar completamente estos alimentos, al menos a 63ºC durante cuatro minutos, respetando las normas de higiene alimentaria. Además, antes de pasarlos por la sartén o el horno, conviene también pasarlos por el grifo para quitar los restos de sangre que se hayan podido quedar o hacerlo, en su defecto con un cuchillo. En el caso del pescado, también es recomendable pasarlo por agua una vez que esté desescamado.
Si hablamos de los huevos, aunque suelen venir limpios y precintados, no está de más, antes de cascarlos, limpiarlos bajo el agua con una gotita de jabón. Y por supuesto, nunca cascarlos encima de la sartén o directamente en el bol donde vamos a trabajarlos, debemos hacerlo en otros para evitar problemas si caen pedazos de cáscara en ellos.