Uno de los miedos comunes al paso del tiempo es la pérdida del pelo. La caída capilar depende de cada persona, pero se acentúa conforme vamos cumpliendo años. Cada caso es un mundo; sin embargo, entre los expertos comienza a ser cada vez más común la idea de que un diagnóstico capilar a tiempo puede salvar nuestra cabellera si se acompaña de tratamiento. Y no, no hace falta viajar hasta Turquía. Te traemos una serie de fármacos que podrían ayudar a evitar (o retrasar) la pérdida del cabello de la mano de una experta, la doctora María Eugenia Sego, experta capilar de MC360.
Estos dos medicamentos se utilizan en el tratamiento de la alopecia genética. Ambos están avalados por estudios y se pueden utilizar tanto en hombres como en mujeres. Aún así, en el caso de las mujeres, se recomienda no utilizarlo durante el embarazo. Sus efectos comienzan a notarse a partir de los cinco o seis meses desde el inicio del tratamiento. Aunque hay que tener cuidado: si paramos en el tratamiento, se irán perdiendo los beneficios a corto plazo. Por ello, si se comienza con el tratamiento, habrá que mantenerlo de por vida.
También hay que tener en cuenta que estos fármacos tienen efectos adversos. La disminución de la libido y la disfunción eréctil son frecuentes en el 3 % de los casos, aunque se adscriben a dosis altas que alcanzan los 5 mg. Según Segovia, los efectos adversos desaparecen al finalizar con el tratamiento de finasteride. En ambos casos se necesita prescripción médica.
Es un vasodilatador que estimula el crecimiento del pelo, también avalada por estudios científicos. Engorda el volumen del pelo y retarda la caída capilar. El resultado podrá verse reflejado entre los 6 y 12 meses desde su inicio. Como en el caso anterior, el tratamiento deberá seguirse de forma ininterrumpida ya que, en caso de cesar, se volverá a la misma situación previa en un mes. También se precisa prescripción médica y, en este caso, los efectos secundarios son el crecimiento de vello facial, especialmente en las mujeres.
Es una alternativa natural al finasteride que se toma a través de vía oral. Proviene de la fruta de la serenoa repens. Al ser natural no tiene ningún tipo de efecto secundario. A pesar de ello, no hay "evidencia científica hasta el momento que lo avale para el tratamiento de la alopecia", según la experta Segovia. Por ello, desde MC360 desaconsejan su uso.
Algunas veces, la alopecia se debe a la falta de nutrientes y vitaminas. La eficacia de las vitaminas, sin embargo, todavía no está evidenciada científicamente. "Son muchas las formulaciones existentes que contienen principios que teóricamente aumentan el metabolismo celular del folículo". Según la doctora, se especifica que existen otro tipo de nutrientes que se pueden incoporar para ayudar a frenar la caída del cabello, como por ejemplo el hierro, fósforo, yodo o magnesio.