Algunas comunidades ya han vuelto al colegio después de meses de clases virtuales. Lo han hecho en medio de un escenario incierto, marcado por las cifras de contagio diario y el miedo de los padres a posibles brotes en los centros escolares. Pese a las medidas de prevención anunciadas (distancia social, toma de temperatura a todas las personas que entren en el centro, ventilación e higiene de manos constante, mascarilla obligatoria), la vuelta al cole se prevé difícil. En medio de este escenario, una nueva mascarilla podría ser de gran utilidad para detectar positivos.
La empresa alicantina Colorprint Fashion, cuya sede se encuentra en la localidad de Muro de Alcoy, acaba de desarrollar y patentar un tejido que cambia de color al aumentar la temperatura corporal. Después de varias pruebas, su uso ha sido homologado para ser utilizado en mascarillas higiénicas por parte del Instituto Tecnológico del Textil. El tejido no solo ha sido pensado para mascarillas, sino también para otros utensilios como pegatinas o pulseras. Todo con el objetivo de detectar aumentos bruscos de temperatura.
La mascarilla es originalmente verde. Cuando la temperatura corporal llega a 37,5 grados, comienza a cambiar a color blanco progresivamente. Su filtración bacteriana, apuntan los creadores, es del 98 %. El tejido, además de para mascarillas textiles de un solo uso, también está pensado para mascarillas térmicas reutilizables. El hecho de que el propio tejido sea el indicador de que la persona tiene fiebre es clave a la hora de detectar posibles positivos. Además del colegio, se recomienda para otros espacios cerrados donde pueda circular el virus, como en el transporte público o en oficinas de trabajo.
Desde Colorprint, que originalmente se dedica a la tintura, acabados de tejidos y estampación de textiles, aseguran que desde el inicio de la pandemia han puesto la experiencia y la trayectoria de la empresa, el grueso de los esfuerzos ha ido dirigido hacia el desarrollo y adaptación de textiles innovadores que tengan la capacidad de ofrecer y aportar soluciones reales a corto plazo para responder ante la crisis sanitaria.
Si todavía estás dándole vueltas a la mascarilla que deben llevar tus hijos en la vuelta al cole, en Uppers te enumeramos cuáles son las idóneas para los más jóvenes. "Los niños y niñas deben usar mascarillas higiénicas acordes a cada rango de edad. Existen tres tallas entre los 3 y los 12 años", explica el informe ¿'Qué debes tener en cuenta al comprar una mascarilla'?, del Ministerio de Consumo. A partir de los 12 años la recomendaciñon es la misma, aunque esta vez la talla debe ser de adulto para cubrir bien boca y nariz.
Entre las mascarillas recomendadas por el Ministerio de Consumo hay dos tipos diferenciados. Las reutilizables, por un lado, cuyo fabricante indica el número máximo de lavados para garantizar su eficacia; las de un solo uso, por otro. En cualquiera de los dos casos no se recomienda utilizarlas más de cuatro horas. Por tanto, atendiendo a la jornada escolar, que de media es de unas 7 u 8 horas, lo más recomendable en términos sanitarios sería dos mascarillas diarias por cada niño, lo que harían 10 mascarillas semanales.