Vas a prepararte una tortilla y al cascar el huevo te encuentras con una motita roja, casi marrón, dentro de él. No te lo esperas, quizá te resulte desagradable y puede que también te preguntes si es mejor quitarla, dejarla o si supone algún riesgo para tu salud. Siempre hemos oído que los huevos son peligrosos, y pese a no estar en los motivos de intoxicación más comunes en España, es verdad que tomar uno en mal estado puede tener consecuencias nefastas en tu salud como la temida salmonella. España fue, en 2019, el tercer país con más brotes detectados de la Unión Europea, con más de 8.000 personas contagiadas. ¿Pueden ser las manchas rojas del huevo causante de ella? Te lo contamos.
Son feas pero no, no presentan ningún riesgo para la salud. No indican que el huevo esté en malas condiciones, ni tampoco que nutricionalmente hablando sea deficiente. Según la agencia federal de la seguridad alimentaria estadounidense, FDA, "la presencia de estos restos de sangre no implican peligro alguno para el consumo humano". Se trata simplemente de restos de sangre que se producen por la ruptura de vasos sanguíneos en el momento de formación del huevo, cuando se desprende el óvulo. En el caso de que la mancha sea marrón, en lugar de roja, puede que se trate de pedazos de tejido del propio huevo que este ha arrastrado.
Pese a ser huevos se comen sin problema, al consumidor, por lo general, no les gustan. El escepticismo viene derivado del falso mito popular de que es un signo de que el huevo ha sido fecundado y que es la marca es un pollito. Esto es totalmente falso. No obstante, aunque puedes consumirlo, será más fácil que lo quites con ayuda de un tenedor antes de cocinarlo.
A parte de estas marcas, existen otras que sí pueden ser indicativas de un problema. El mismo organismo reconoce que "si en lugar de ser un rastro pequeño, es una mancha en la clara rosada y extensa, el huevo debe ser desechado de inmediato", ya que puede ser indicativo de que está infectado con la bacteria Pseudomas sp, causante de fuertes intoxicaciones. ¿Y si aparecen como nubes blanquecinas en la clara? En este caso es todo lo contrario, es signo de que el huevo es muy fresco y según pasen los días irán desapareciendo, a medida que pierde frescura.
Aunque seguro que alguna vez te has encontrado con una, estas manchas rojizas no son demasiado frecuentes porque los huevos que las tienen suelen des desechados en los centros de selección, antes del empaquetado, por lo que al mercado llegan pocos, solo representan entre el 1 y 3% de los que se comercializan. Y, curiosamente, son muchos más comunes en los huevos de color (las tienen el 18% de los que ponen las gallinas) que en los blancos (solo un 0,5% las presentan), esto se debe a que en los segundos son mucho más fáciles de detectar ya que la comprobación se hace con una luz brillante que permite ver el interior de estos.
¿Y qué pasa con los huevos eco? Como normalmente vienen de pequeños productores locales, no suelen pasar estos controles tan exhaustivos y es más fácil que tengan estas motas. Sin embargo, algunos expertos las asocian más bien a las granjas intensivas donde los animales están sometidos a un mayor estrés. También son más comunes en gallinas mayores, que están a punto de terminar el ciclo fértil, y en aquellas que sufren falta de vitaminas A, D y K.
El consumo semanal de huevos Pese a que tiempo atrás se recomendaba no tomar más de tres a la semana, la evidencia científica asegura que tomar uno al día no incrementa el riesgo de enfermedad cardiovascular. Desde el Centro Internacional del Huevo y la Nutrición (IENC) aseguran demás que son una estupenda fuente de proteína, "un solo huevo aporta seis gramos y 14 nutrientes esenciales".
También son buenos para el cerebro debido a la colina, "un nutriente poco conocido que juega un papel importante en la construcción de membranas celulares, y participa en varias funciones vitales de nuestro cuerpo". Por otro lado, desde IENC desmienten que sean los culpables del colesterol malo, sino todo lo contrario "contienen un alto nivel del colesterol bueno (HDL) y las investigaciones muestran que las personas con niveles más altos de HDL generalmente tienen menor riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas" y, además, ayudan a la vista gracias a la presencia de vitamina A y antioxidantes.
No están pintados, son así de forma natural y proceden de la gallina Araucana. Se diferencian de los convencionales en la dureza de la cáscara y el tamaño de la yema. "La cáscara tiene muchísima calidad, es más dura y tiene mejores propiedades para la conservación del producto. La yema es mayor que la clara y suele ser de un tono más pastel", nos explica Almudena Pérez, Vicepresidenta de Araucana Club. Para saber más cosas de estos huevos, dale al play.