La escena que describe Lola Bueno, una vecina del barrio madrileño de Mirasierra, podría servir de arranque a una maravillosa película sobre la amistad. Cuatro amigas octogenarias que se reúnen cada martes en una cafetería. Entre ellas está su madre y llevan años con esta costumbre, aunque el grupo ha ido menguando a causa de los achaques de unas o el fallecimiento de otras. Llegó un momento en que estas cuatro amigas se miraban entre sí con la sensación de haber agotado todo lo contable e incontable. Desde los chistes hasta los recuerdos. Fue entonces cuando Lola, consciente de los beneficios que tiene mantener una vida social activa a esas edades, decidió que la cuadrilla de su madre necesitaba savia nueva.
"Pensé que sería una idea muy buena formar una pandilla de mayores que tomaran café los martes y escribí un anuncio en la plataforma Nextdoor, que es una aplicación fantástica y la usa mucha gente del barrio. En él conté la intención de mi madre, que llevaba 50 años en Mirasierra, de abrir su grupo de café de los martes a cualquier persona mayor de 70 años", cuenta Lola. Lo planteó como un punto de encuentro sin compromiso. "Para que supieran que en esa cafetería los martes tomaban el café juntos. Si un día no podían, no pasaba nada. El caso era hacer ese rato más animado".
Nextdoor es una aplicación que nació en 2010 San Francisco con el propósito de construir conexiones y comunidades como una necesidad humana universal, según nos cuenta su CEO en Madrid Katherine Villegas. Hoy está presente en más de 295.000 barrios de todo el mundo. En España aterrizó en 2018 y ha llegado ya a más de 3.500 barrios. "Los vecinos buscan conectar con la comunidad de sus barrios para encontrar información fiable, ofrecer y recibir ayuda y construir conexiones en el mundo real con los que están cerca: vecinos, negocios o servicios públicos", explica.
En nuestro país no ha podido tener mejor recibimiento. "Aquí el sentimiento de comunidad -detalla Katherine- es muy fuerte y en estos años hemos visto una gran cantidad de iniciativas solidarias y sociales, como grupos para combatir la soledad o huertos urbanos vecinales. Los vecinos se han unido también para ayudar a personas, como por ejemplo con el volcán de La Palma o la crisis en Ucrania".
Lógicamente, lo primero que le vino a la cabeza a Lola, la vecina de Mirasierra, es que generalmente es una aplicación desconocida para gente mayor de 70 u 80. No le importó porque fueron los hijos, casi todos alrededor de los 50, los que dieron el primer paso. "Me di cuenta de que tenía que poner una líder del grupo, una embajadora o relaciones públicas para que la gente no llegase el primer día y sintiese el corte de no saber dónde sentarse ni cómo. Se lo propuse a mi madre, que es muy simpática y sociable, para que fuese ella quien les animase e hiciese las presentaciones oportunas. Al final resultó un grupo de ocho o nueve mayores. Es bonito ver cómo gente tan mayor mantiene la capacidad de hacer pandilla, reírse y conocerse".
La filosofía es una vuelta a lo de antes, a ese sentimiento de pueblo y de amistad entre las gentes. "Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo", escribió Eduardo Galeano. Y con este espíritu, Juan Antonio Collantes, otro usuario, se animó a abrir un grupo en Nextdoor en plena pandemia.
Bajo el reclamo "No estás solo, habla", se sumaron más de 100 vecinos. "Primero fueron amigos míos sanitarios, que no sabían dónde dirigirse ni con quién hablar para no llevarse los problemas a casa. Se difundió y enseguida empezaron a llamar personas que se dedicaban a otras cosas y sufrían soledad".
De hecho, una de las iniciativas más exitosas de esta plataforma ha sido 'Cuenta conmigo', una campaña que lanzan cada año entre noviembre y febrero para combatir la soledad no deseada y ayudar a mejorar la salud emocional. "La soledad no deseada es un tema que puede afectar a cualquier persona y en cualquier momento, pero los meses de invierno, cuando no apetece salir a la calle puede acentuarlo", detalla Katherine. Cada año miles de personas se unen a ella, ofreciendo y pidiendo ayuda y cada vez son más las historias que nos llegan de amistades y de lazos que se van construyendo.
Juan Antonio ha creado un nuevo grupo que bautizó 'Papi soltero', donde sus 73 miembros, casi todos padres solteros como él, se ayudan y comparten fatigas. Le ha permitido conocer gente de su propio barrio e incluso de su propio portal. La experiencia le ha animado a transcribir todos esos pensamientos y preocupaciones en forma de relatos y poemas que han resultado muy terapéuticos para sus vecinos.
Katherine nos cuenta que registrarse en Nextdoor es muy sencillo, a través de la app o en la web. Además, los vecinos ya registrados pueden invitar a otras personas de su barrio a unirse. "Nos basamos en la confianza -aclara-, por lo que requerimos que todos los usuarios se registren con su nombre y dirección, para asegurarnos de que son usuarios reales".