Lo que le ocurre a Pablo es lo mismo que le podría estar pasando a tu hijo o al de tu vecino, a ese joven que, cuando te cruzas, con él piensas: ¡Vaya chico raro! Y él, sin levantar la cabeza, musitará para sí algo así como lo que dice el autor argentino Roberto Arlt en 'Los siete locos': "Usted me mira asombrado, claro, veía a un hombre raro, quizá, pero no se daba cuenta de que toda esa rareza derivaba de la angustia que yo llevaba escondida en mí".
Pablo es el protagonista de 'No es tan raro', el título elegido para la campaña del grupo Nhood España que visibiliza la fobia social. Su director es Miguel Ángel Olivares y cuenta con el respaldo del Instituto Terapéutico de Análisis de la Conducta Ítaco, especializado en este tipo de trastornos.
Este joven, al que da vida el actor Jorge Motos, de 24 años, tiene que enfrentarse a su primer día de universidad, a situaciones aparentemente comunes, pero no para él. Presentarse ante los nuevos compañeros, conocer gente nueva, una primera cita, intercambio de móviles... Cosas rutinarias. Pero cada decisión, por nimia que parezca, a él se le vuelve un muro infranqueable. Puede que sea un joven fantástico, inteligente e interesante, pero se avergüenza cuando está delante de sus compañeros, tiene miedo de que le humillen, le juzguen, le valoren de forma negativa o le rechacen. Lo vive como un temor intenso e insoportable y empieza a sentir que está absolutamente fuera de su control.
Suda, enrojece, tiembla, se le acelera el corazón, su mente se queda en blanco, no puede hablar. Ni siquiera es capaz de mantener el contacto visual por más que quiera y finalmente huye. Lo fácil es suponer que Pablo es un joven extraño o extremadamente tímido. Nada más lejos de la realidad. Sufre fobia social y tiene que convivir con la ansiedad a cada instante. Esas señales son manifestaciones automáticas de su cuerpo en respuesta a situaciones de emergencia. Se trata de una activación fisiológica involuntaria por parte de nuestro organismo humano cuando percibe una situación como peligrosa o de riesgo. Sería una respuesta útil si la amenaza fuese real.
La fobia social es uno de los trastornos de salud mental más comunes y también más invisibles. Se expresa con un temor persistente a ser humillado en público y lo sufre el 13% de los españoles. En el caso de los jóvenes, especialmente universitarios, más de la mitad presentan o han presentado los signos más comunes de este trastorno de forma más o menos reiterativa. En ocasiones, llegan a abandonar los estudios. La detección temprana y una intervención a tiempo minimiza sus efectos y evita que continúe con consecuencias que, a veces, son fatales.
Es el objetivo de la campaña 'No es tan raro', en la que están colaborando diferentes centros comerciales de toda España. Sus protagonistas son jóvenes corrientes, como nuestros hijos o tantos chicos que se dirigen cada mañana a sus institutos o universidades. Su actor principal, Jorge Motos, estuvo nominado en los Premios Goya como mejor actor revelación por su papel principal en la película 'Lucas'. En el cortometraje, producido por TheWokis y Gadol Producciones, aparecen también Gonzalo Seija y Ana Ponomarenko. Y se han sumado influencers que promueven la salud en sus redes sociales, como Inés Hernand, Merigo, Caryatydes y Julia Moreno. La iniciativa, así como la información y datos sobre el trastorno de ansiedad social pueden ser consultados en la web www.noestanraro.com.
"Queremos ser un altavoz para aquellos que no pueden expresarse y disponer de una herramienta, no solo que dé voz al problema, si no que divulgue información sobre el trastorno e incluso ponga en contacto a afectados con una asociación de psicología que pueda orientarles", apuntan desde el departamento de Marketing de Nhood España.
El primer paso sería identificar las principales señales que estos jóvenes pueden ir dando en su vida cotidiana cuando se les presenta un evento social:
El siguiente paso sería favorecer en el entorno familiar una comunicación fluida, de manera que todos compartan su día a día, sus preocupaciones o dificultades. "La ansiedad social es una de las demandas más prevalentes en la actualidad y que más podemos encontrarnos en las consultas de psicología", indican desde Ítaco. Por eso, la finalidad del corto es demostrar que sí, que "si hay una detección temprana y una adecuada intervención, se pueden reducir los efectos y evitar que se prolongue en el futuro".
Las causas que pueden generar esta respuesta de emergencia son múltiples y exigen una evaluación individual en cada caso concreto. "El motivo por el cual una persona con ansiedad social ha asociado este temor y miedo a determinadas situaciones tiene a veces su origen en experiencias desagradables o en un aprendizaje a partir de la observación de las situaciones vividas por otros o por uno mismo".
Para realizar una buena evaluación e intervención, el grupo de psicólogos de Ítaco trabaja no solo con el joven sino también con su entorno más cercano. "Se trata de entender el problema en toda su complejidad y por tanto llevar a cabo la mejor intervención, teniendo en cuenta el momento evolutivo del joven y fijándonos en las dificultades o problemas y también en las fortalezas que ayudarán a poder resolverlos. En terapia nuestro trabajo es identificar cómo se ha producido ese aprendizaje, por qué se está manteniendo en el momento actual y, lo más importante de todo, establecer las pautas correctas para revertirlo. Enseñaremos a la mente a aprender de nuevo, reduciendo progresivamente esa ansiedad".