En el mundo de las relaciones sentimentales se han puesto de moda términos como ‘love bombing’, ‘ghosting’ y ‘orbiting’, usados para describir las diversas dinámicas y comportamientos que suceden dentro de las parejas. A estos términos se suma uno nuevo: ‘banksying’, que es una técnica para terminar una relación catalogada como muy cruel debido a la forma en que se lleva a cabo.
Este método se refiere a la planificación por adelantado para separarse de la pareja sin comunicárselo. Aunque puede parecer beneficioso para quien la realiza, pues evita una confrontación incómoda, es extremadamente perjudicial para la persona que la sufre. En este proceso, el que la planea se va desenamorando en silencio y se distancia emocionalmente sin que su pareja se entere, lo que genera una ruptura unilateral y solitaria.
El banksying se da cuando una persona termina de manera abrupta la relación con otra persona, decidiendo acabar con su pareja pese al tiempo o los momentos compartidos. Sin embargo, una distinción particular de este término es que, la persona que quiere acabar con la relación lo planifica sin avisar a su pareja.
En un acto individual, esta persona planea el tiempo, espacio, lugar y demás escenarios posibles para terminar con su pareja amorosa, toda esta estrategia la hace a espaldas del otro u otra; aunque la persona que realiza el banksying prioriza su salud mental y emocional, puede generar los efectos contrarios en la otra persona.
Mientras lleva a cabo su plan, puede seguir fingiendo que todo va muy bien y sigue con la dinámica amorosa, pero, cuando llega el momento de la ruptura, la otra persona puede tener consecuencias emocionales.
Los psicólogos y expertos en relaciones de parejas aseguran que existen algunos comportamientos que podrían indicar que uno de los involucrados de una relación está haciendo banksying, siendo el principal el distanciamiento claro de uno de los integrantes. Entre las señales más claras están:
Lara Ferreiro, psicóloga de la aplicación de citas Ashley Madison y experta en parejas, aseguraba a '20 minutos' que “el banksying, o vivir el duelo durante la relación, suele durar entre tres y seis meses hasta un año, tiempo en el que uno de los integrantes de la pareja no comunica lo que está mal y la relación va muriendo lentamente”.
La primera fase del banksying es la negación, cuando la persona se da cuenta de que ya no está enamorada de su pareja, lo cual lleva a tener sentimientos de culpa, ira, tristeza, miedo, entre otros. Pese a tener estos sentimientos, la persona no se comunica con su pareja, volviéndose una relación tóxica, para ambos componentes.
Una vez que se llega a la fase de aceptación, el miembro de la pareja que hace banksying ya no sufre y termina con la relación, por lo que puede seguir adelante con su vida sentimental e incluso podría sentirse preparado para empezar una nueva relación.
Mientras que a la persona que sufre banksying, el fin de la relación le pilla totalmente por sorpresa, por lo que en el momento en el que termina la relación comienza su duelo más tarde que el otro integrante.
Precisamente por eso se considera que se trata de una técnica "muy cruel" en la que la persona que lo realiza no es consciente de la gravedad de lo que está haciendo, lo cual revela una gran falta de responsabilidad afectiva hacia la otra persona.
Está relacionado con el artista británico Robbie Banks, también conocido como Banksy. Aunque pareciera que no hay algo en común que vincule al artista urbano con las relaciones de pareja, el misterio que hay detrás de Banksy inspiró el término que surgió entre las generaciones más jóvenes.
En 2018 sucedió un acto que dejó atónitos a todos los críticos del arte: en Gran Bretaña se llevó a cabo una subasta de arte y participó una obra titulada “Niña con globo” del artista Banksy. Tras una serie de ofertas, la subasta se cerró en 1.2 millones de euros.
Al momento de la compra, con el martillazo de venta se activó un mecanismo que destruyó la pieza de arte. De manera imprevista y frente a los espectadores se destruyó la obra que fue vendida por 1.2 millones de euros, este evento dejó asombrados y confundidos a los compradores de arte. Posteriormente el autor de esta obra explicó sus razones de haberlo hecho y confesó que lo planificó por mucho tiempo.
El tiempo que le tomó hacer este acto, la planificación y demás detalles del hecho fueron los elementos que se retomaron para el término banksying que se adoptó entre los jóvenes.