Twitter y las criptomonedas están viviendo un auténtico terremoto. Por un lado, tras la compra de la red social por parte de Elon Musk, esta no vive su mejor momento tras la dimisión en masa de gran parte de sus empleados ante las nuevas exigencias laborales que el magnate quiere imponer a sus trabajadores, dejando en el aire la viabilidad de la empresa. En otro punto están las criptomonedas. El colapso y la quiebra de FTX, tercera plataforma de compraventa de criptodivisas en el mundo, ha hecho que se quede sin liquidez y afecta a miles de inversores. Como cada semana en ‘Money Talks’, Javier Ruiz da los puntos clave sobre lo que está pasando en Twitter y las consecuencias de la quiebra de FTX. La charla completa, en el vídeo.
Hace solo unos 20 días que Elon Musk compró Twitter, ni un mes ha pasado. Actualmente no existen cifras oficiales de los trabajadores que han abandonado la compañía porque, entre otras cosas, se ha despedido a todo el equipo de comunicación y no hay forma de contactar con la empresa y saber qué ocurre. Por eso mismo, solo se puede hablar de estimaciones y, ahora mismo, se cree que el 75% de la plantilla podría estar fuera y, los que se quedan, lo hacen porque son extranjeros y necesitan un trabajo para poder seguir viviendo en Estados Unidos en un momento complicado en el sector tecnológico, con Facebook y Amazon despidiendo a parte de su plantilla.
Ya hay senadores que han pedido a la Comisión Federal de Comercio (FTC) que tome medidas y la propia FTC ha señalado que están siguiendo lo que está pasando con Twitter con una investigación ya abierta. También se está abriendo otra en Irlanda, donde la compañía tiene una sede, y también la Comisión Europea se está planteando abrir otra.
Además, Twitter no cotiza en bolsa, pero ya está teniendo su efecto afectando principalmente a Tesla, que se está desplomando en bolsa. No solo en Tesla, su propuesta de verificación ha traído problemas a otras compañías en su cotización en bolsa, como la farmacéutica Lilly, que se derrumbó en bolsa tras un mensaje falso de una cuenta que se hacía pasar por ellos tras pagar cuota de verificación implantada por Musk.
En cuanto a las criptomonedas, se puede hablar de un auténtico 'criptocolapso'. Toda la burbuja de las criptomonedas está comenzando a explotar y, con la quiebra de FTX, ha cogido a un millón de personas. Esta compañía, con el dinero que recibía, estaba invirtiendo en otros activos y se ha quedado sin liquidez para el momento en el que sus clientes reclaman de vuelta el dinero invertido. ¿Qué ha pasado? Que le faltan unos 8.000 millones.
Esto provoca un efecto dominó en el que otras compañías también empiezan a caer, pero el problema clave es otro. ¿Dónde se reclama? Es complicado, FTX no está cubierta ni por el Fondo de Garantía de Depósitos, ni por otros, no ha organismos que la regulen en España.