La entrada de los gigantes tecnológicos en la banca puede desembocar en una auténtica revolución financiera. Apple ha irrumpido en los servicios financieros con unas ofertas por depósito muy por encima de la que ofrecen las entidades tradicionales. Como cada semana en 'MoneyTalks', Javier Ruiz nos explica qué puede significar esto, qué empresa será la siguiente en ofrecer productos similares y en qué condiciones pueden llegar a España.
Apple desarrolla en todos sus movimientos una estrategia glaciar. Es decir, se mueve muy despacio pero cuando te golpea lo cambia absolutamente todo. En 2001 llegó el iPod, en 2007 nos trajo el iPhone, en 2010 tuvimos el iPhone y ahora, en 2023, nos prepara para el iBank. Fruto de su alianza con Goldman Sachs, ha montado una cuenta con una remuneración del 4,15%, de momento disponible solo en EEUU. Baste recordar, que en España, quien más paga es el Tesoro, y lo hace al 3%.
La cuenta no tiene comisiones ni exige un saldo mínimo, por lo que solo en sus cuatro primeros días consiguió captar 1.000 millones de dólares en depósitos. Más allá del jugoso tipo de interés que ofrece, Apple tiene a su favor tres ventajas. 1) Su base de fans entregados que le permite contar con 1.200 millones de potenciales usuarios antes siquiera de empezar. 2) Su tamaño, con una capitalización de 2.6 billones de dólares, que es el doble del PIB español anual. y 3) Sus servicios de suscripción, que por sí mismos ya le generan ingresos por valor de 55.000 millones de dólares, es decir, más de lo que ganan JP Morgan, City Bank y Goldman Sachs juntos.
Pero además tiene una cuarta ventaja informal: Lo sabe todo de sus clientes. El deporte que hacen, los pasos que dan, si conducen, a qué velocidad lo hacen, si se les puede vender una póliza de seguros, si necesitan un préstamo... Gracias a los datos de geolocalización sabe absolutamente todo sobre los hábitos del usuario. Lo que le permite entrar con fuerza en el juego bancario es la información, los datos.
¿Llegará este iBank a España? Sin duda, aunque no tiene prisa. Apple no es un banco, por lo que necesita una licencia bancaria. En EEUU su aliado es Goldman Sachs. Aquí es más que probable que se busque un socio, y tendrá todas las garantías que ampara el Banco de España. Pero se alíe con quien se alíe, debe quedarnos claro que en la mesa se sentarán un elefante y un ratón, por muy grande que sea ese banco en el que podamos pensar.
Además, Apple no será la única en llegar. Google es la siguiente, y no tardará mucho, porque tiene la misma dinámica y sabe sobre nosotros tantas cosas o más que Apple. Lo que viene es una carrera de gigantes tecnológicos por la siguiente valla. La primera fue la de la información y ahora viene la de la banca. Vamos a vivir una auténtica revolución financiera y va a haber víctimas. Para saber más sobre el futuro del mercado bancario puedes ver el vídeo con la charla completa con Javier Ruiz.