Las estatuillas de los Oscar de este año ya tienen dueño, con ‘Todo a la vez en todas partes’ como la película triunfadora de la noche con el premio a mejor película y tres de sus actores victoriosos. Tras lo ocurrido en la ceremonia de 2022, sí, la del puñetazo de Will Smith a Chris Rock, superarla estaba complicada. Hasta establecieron un protocolo para que no ocurriese otro altercado. Con todo bien medido, la gala salió sin imprevistos y, por ello, algo aburrida. Sin embargo, hubo más de una anécdota que nos hará recordar esta fiesta del cine.
El premio a mejor actriz de reparto estaba, según las quinielas, entre Jamie Lee Curtis por ‘Todo a la vez en todas partes’ y Angela Bassett por ‘Black Panther: Wakanda Forever’. Al final, el premio fue a parar a manos de Curtis en la que es, aunque parezca mentira, su primera nominación a los Oscar. En el momento de lectura ocurrió el que probablemente es el instante más viral de la gala: la celebración de Curtis frente al rostro de decepción, y enfado, de Bassett.
Ni aplausos, ni sonrisa, ni el más mínimo gesto de alegría o de celebración por el premio a su compañera de profesión durante los segundos que compartió la pantalla partida con la galardonada y el resto de las nominadas en la categoría, que tuvieron una reacción muy diferente.
Si algo tiene de especial la gala de los Oscar es que reúne a las mayores estrellas del cine y, cómo no, se produce más de un reencuentro que emociona a más de un nostálgico. Este ha sido el caso de Hugh Grant y Andie MacDowell, protagonistas de ‘Cuatro bodas y un funeral’, que pronto cumplirá 30 años.
Los dos actores se reunieron en el escenario para presentar el premio a mejor diseño de producción donde no faltaron las bromas. Grant señaló a su compañera para decir que “sigue deslumbrante”, mientras que luego se señaló a él mismo y bromeó diciendo que su cara era “básicamente, un escroto”, broma que despertó la risa del patio de butacas.
Una de las imágenes más tiernas de la gala fue el abrazo que Ke Huy Quan recibió de Harrison Ford tras ganar el Oscar. Ambos protagonizaron ‘Indiana Jones y el templo maldito’ en los 80, cuando el galardonado solo era un niño. En esta temporada ya se han encontrado más de una vez, pero quizá el más emotivo ha sido este, en el que aquel niño que todos conocimos como Tapón llevaba un Oscar en su mano al abrazar a Ford.
John Travolta fue el encargado de dar paso al In Memorian y a la actuación de Lenny Kravitz que acompañaba las imágenes. El actor no pudo contener las lágrimas y se rompió durante el discurso al recordar a su compañera y amiga Olivia Newton-John, con la que protagonizó ‘Grease’.
Durante el In Memorian, quizá el momento más triste de la gala, se recordó a todos aquellos profesionales de la industria cinematográfica que nos dejaron a lo largo del último año. En España se esperaba una mención a Carlos Saura, tres veces nominado al Oscar a mejor película extranjera. Sin embargo, ni rastro del director fallecido hace un mes, que no fue el único olvidado en ese instante de la gala, también se olvidaron de otros profesionales de la industria como Anne Heche, Paul Sorvino, Tom Sizemore y Charlbi Dean, actriz que participaba en 'El triángulo de la tristeza', película nominada.
Pese a la cantidad de nominados, solo unos pocos se llevan la estatuilla a casa. Por eso, para consolar al resto, en especial a Angela Bassett, Jimmy Kimmel, presentador de la ceremonia, subió al escenario acompañado de un burro para hacer referencia a la película 'The Banshees of Inisherin'. ¿La razón? Los no premiados lo podrían abrazar.
El burro no fue el único animal que se coló en el escenario, también un oso, aunque en esta ocasión era un disfraz. Ese oso hacía referencia a la película ‘Cocaine bear’ y entregaba con Elisabeth Banks el premio a mejores efectos especiales. Antes de dar el galardón, el oso señaló a varios intérpretes, a lo que la actriz le recordó que había “que esperar a la fiesta de después. Por cierto, la cocaína no es real, son efectos visuales”.
Uno de los momentos más esperados de la gala era ver a Lady Gaga interpretar ‘Hold My Hand’ en el escenario, canción por la que estaba nominada al pertenecer a la película ‘Top Gun: Maverick’. Sin embargo, todo ha sido eclipsado porque durante el photocall corrió hacia un fotógrafo que se había caído a socorrerlo. Todo un detalle de una de las grandes estrellas de la música.
Iba a ser raro que no hubiese ninguna mención a Will Smith, protagonista de la gala del año pasado, y no para bien. Y ahí estaba Jimmy Kimmel. “Queremos que se diviertan, se sientan seguros y, lo que es más importante, queremos que yo me sienta seguro. Si alguien comete un acto de violencia, se le dará un Oscar y un discurso de 19 minutos. Prometido. Si pasa lo que pasó el año pasado, no hagas nada. Como el año pasado. O dale un abrazo al asaltante”, dijo el presentador al inicio de la gala.
En plena alfombra roja, que este año era de color champagne, Pedro Pascal, uno de los presentadores de la gala y acompañante de su hermana Javiera Balmaceda Pascal, que participa en ‘Argentina 1985’, posaba junto a ella cuando, de repente, Salma Hayek apareció corriendo para ponerse al lado del actor de moda. Pues sí, parece que la mexicana también es fan del protagonista de ‘The last of us’ y ‘The Mandalorian’.