Recién cumplida una década de la muerte de Robin Williams, son muchos los que no solo siguen recordando la obra del actor, sino también sus gestos como persona. El intérprete es historia de la gran pantalla y uno de los papeles que le consagró y le acercó más al público fue ‘Señora Doubtfire’, estrenada en 1993, cinta en la que Williams daba vida a una ama de llaves que no pasaba desapercibida. Un papel clave no solo en su carrera, también en su vida personal, marcada por su lucha contra la adicción a las drogas y el alcohol.
Más de 30 años después de su estreno, no son pocos los que recuerdan con cariño aquella cinta con la que crecieron durante la década de los 90, más aún cuando conocen algunas anécdotas del rodaje como la que Sally Field, protagonista de la película, ha recordado estos días para homenajear a su compañero de reparto cuando se cumplen diez años de su muerte.
En una entrevista con la revista Vanity Fair, que recopila el testimonio de gente cercana al actor para homenajearle en el décimo aniversario de su muerte, Field recuerda que cuando estaban rodando ‘Señora Doubtfire’ ella se enteró de que su padre había muerto. En ese momento, Robin Williams fue el que fue hasta el director de la cinta, Chris Columbus, y le convenció para cambiar el plan de rodaje y que así Sally Field pudiese viajar para despedirse de su padre.
“No había compartido esta historia antes”, dice la actriz. “Estaba en la caravana fuera de la sala del tribunal donde rodamos la escena del divorcio. Mi padre había sufrido un derrame cerebral unos años antes y estaba en un centro de cuidados. Me llamó el médico para decirme que había muerto. Me preguntó si quería que lo pusieran en el reanimador. Le dije que no porque él no quería eso. ‘Simplemente déjenlo ir. Por favor, díganle: Sally se despide”, recuerda la actriz sobre aquel momento que no fue nada fácil para ella.
Pese a su dolor, la intérprete decidió salir de la caravana y seguir rodando todo lo que quedaba de día ocultando al resto del equipo lo que había pasado. Sin embargo, fue Robin Williams el que se percató de que no estaba en su mejor momento y le preguntó si se encontraba bien.
“No, no lo estoy, Robin. Mi padre acaba de fallecer”, recuerda que le contestó. El actor supo al instante que debía sacarla de allí y así lo hizo. “Rodaron escenas sin mí durante todo el día. Pude volver a mi casa, llamar a mi hermano y hacer los arreglos necesarios. Es una cara de Robin que la gente quizá no conocía, era muy sensible e intuitivo”, rememora.