Muere Maki Kaji, el desertor universitario que reinventó el Sudoku: la historia tras el juego que cambió nuestros veranos

  • Fallece a los 69 el inventor japonés que, con el juego de números, cambió la forma de entretenerse de toda una generación

  • En 1990, Kaji creó la empresa editorial Nikoli junto a dos amigos de su infancia

  • Recopilamos la historia de reinvención de un pasatiempo que los periódicos rechazaron

A principios de 1990, Maki Kaji reinventaría el juego que puso patar arriba periódicos y veranos. El Sudoku, que en su significado original japonés quiere decir "números individuales", se convertiría en el nuevo niño mimado de las páginas de pasatiempos. Un fenómeno en el que Kaji, que ha fallecido a los 69 años a causa de un cáncer, convirtió en éxito editorial sin más ambición que la de entretener de manera "fácil y sencilla a todo el mundo, principiantes incluidos", contó a la BBC.

El verdadero origen del Sudoku

Una cuadrícula numerada en la que toca conseguir que los números correspondientes al total de cajas aparezcan, sin repetirse, en cada línea y cubo. Con mayor o menor dificultad, la editorial Nikoli, la que Kaji creó junto a dos amigos de su infancia para promover el sudoku, asegura que 200 millones de personas en unos 100 países ya han resuelto este juego de lógica. Y eso que, en sus comienzos, recibieron el rechazo para publicar sus juegos por parte de periódicos londinenses y neoyorquinos.

Sin embargó, y aunque fue Maki Kaji quien lo bautizó y presentó tal y como hoy lo conocemos, el origen del sudoku no está del todo claro. Según cuenta The New York Times, que lo entrevistó en 2007 y recupera su historia tras su muerte con un perfil, "sus orígenes no están claros. Algunos le siguen la pista hasta Leonhard Euler, un matemático suizo del siglo XVIII. Otros dicen que la idea vino de China, a través de India, al mundo árabe en el siglo VIII o IX". El secreto de la empresa de Kaji, dijo entonces, radicó en "que probaba y perfeccionaba en gran medida los rompecabezas existentes".

Por humanos y para humanos

Kaji, que no finalizaría sus estudios universitarios en Keio, era hijo de una vendedora de kimonos y de un ingeniero de telecomunicaciones. Su ambición con la empresa, insinuaba tras contar que había tardado en registrar la patente del sudoku cuando el juego ya estaba en pleno boom, no era tanto hacer dinero con el juego sino hacerlo humano.

A pesar de los avances tecnológicos, el inventor japonés se mantuvo fiel a su esencia: todos los puzles y juegos de su empresa son desarrollado en exclusiva por sus trabajadores, nunca por ordenador.

Acertijos para personas mayores

En su afán por humanizar el sudoku y entretener a tantas personas como pudiera, Kaji tomó una decisión en 2017: crear sudokus más sencillos y accesibles para adultos mayores La idea surgió tras recibir una carta de un ciudadano tendero japonés en la que le decía que los acertijos de su editorial eran demasiado difíciles.