En sus 40 años de carrera Loles León ha hecho prácticamente todo lo que se puede hacer interpretativamente hablando. Ha participado en decenas de películas, muchas de ellas entre las grandes obras del cine español, sin dejar nunca de lado su tan admirado teatro o la televisión, tanto en series como en programas. Desde hace unos años triunfa en ‘La que se avecina’, serie en la que abre una nueva etapa de cara a la próxima temporada, en la que los personajes se han mudado de localización tras más de una década entre los mismos decorados.
Si alguien ha seguido lo más mínimo la carrera de la actriz sabe que León no tiene pelos en la lengua a la hora de hablar de prácticamente cualquier tema, incluido el sexo, menos aún a su edad, cumplió este verano 72 años.
Hace solo unos meses hacía un alegato a favor del sexo de la mujer madura. “Ahora las mujeres de 70 para arriba estamos super potentes sexualmente. Las mujeres de mi edad hemos hecho un recorrido que era casarse y tener una vida en la que criar a los hijos, han trabajado, han luchado”, por lo que reivindicaba que, se tenga la edad que se tenga, se puede seguir utilizando el cuerpo “para lo que te dé la gana, sobre todo para gozar y ser feliz”.
Ante la presentación de la nueva temporada de ‘La que se avecina’, que trae consigo una nueva localización y la incorporación de nuevos personajes que podrán (más todavía) patas arriba la vida de los vecinos que a conocemos, Loles León era entrevistada por Bluper y hacía unas declaraciones que, como ya es costumbre en ella, no dejan indiferente a nadie.
Preguntada por le apetece cambiar de registro, la intérprete confesaba que tiene “hambre de drama. Bueno, también tengo hambre de porno. Yo haría una porno. Pero nada de sensual ni porno light. Yo quiero porno duro”. Con estas palabras contestaba la actriz, que deja en el aire que se trate de una broma o no.
Además de la serie, Loles León está también inmersa en el teatro con ‘Una noche con ella’, obra dirigida por Juan Luis Iborra, “una noche con ella contiene un 80% de realidad y un 20% de ficción, pero ella jamás confesará lo que es verdad y lo que es mentira. Es el espectador quien debe averiguarlo”, reza la sinopsis para descubrir así parte de nuestra historia y de la vida de la actriz.