La incertidumbre económica se ha convertido desde hace varios años en pan nuestro de cada día, la inversión inteligente y estratégica se ha vuelto una necesidad para muchos, incluso siendo de vital importancia. En un recién estrenado 2024 las cosas distan poco de finales del 2023, pues el mercado económico está en constante evolución, lleno de desafíos y oportunidades únicas.
Los expertos aseguran que el 2024 llega cargado de ajustes y oportunidades en la economía global, con tendencias, perspectivas y necesidades muy diferentes dependiendo de cada país y situación político-económica. “La COVID, el conflicto entre Rusia y Ucrania, la falta de suministros, la inflación… Desde 2020 no han parado de sucederse eventos inesperados, lo que en economía llamamos cisnes negros. Este 2024 lo hemos comenzado con la guerra palestino-israelí, por lo que puede tener consecuencias económicas globales, sobre todo si los países productores de petróleo y gas natural se ven envueltos en el conflicto”, asegura Antonio Romo Baragaño de Consultoría Baragaño es consultor financiero certificadoy experto en inversiones alternativas y seguras a corto plazo.
Con este panorama, ¿por qué sectores hay que apostar? Especialistas en inversión como Romo Baragaño, aseguran que “sin duda, tecnología y energías renovables, como llevamos viendo en años anteriores. Aún queda mucho mercado por explotar en estas áreas. También las materias primas, y aquí me refiero a metales preciosos como plata, paladio u oro. Aunque este último se considere un activo refugio, también en años de estabilidad económica ha tenido un buen desempeño, por eso, siempre me gusta mantenerlo en cartera. Y, por último, el mercado de los hidrocarburos, ya que la demanda sigue aumentando. A pesar de que las renovables tengan cada vez más peso, los combustibles fósiles se mantienen con tendencia al alza y no hay evidencias de que vaya a haber una disminución de consumo en el corto plazo”.
Sectores donde invertir el año próximo
Las tendencias en inversión y diversificación son muy importantes a la hora de desarrollar una estrategia de inversión eficaz. Como en todo, no hay una forma perfecta de invertir en los mercados financieros, la clave para tener éxito radica en la diversificación y en la elección de los productos adecuados de acuerdo con la propensión al riesgo y la fase del ciclo económico. “Aquellas que estén descorrelacionadas del mercado. Ante la inestabilidad geopolítica que llevamos viendo estos últimos años, prever lo que pasará 'ahí fuera' se hace cada vez más difícil, por eso, buscar sectores independientes al mercado global me parece una muy buena estrategia”, asegura Romo Baragaño.
Sectores tecnológicos. La tecnología es uno de los sectores que más ha crecido a raíz de la pandemia y su tendencia sigue siendo al alza y seguramente seguirá creciendo en el futuro. Algunas de las empresas líderes en el sector son Apple, Microsoft, ASML, Infineon, Alphabet y TSMC.
Energías Renovables. Es otro de los sectores en constante crecimiento debido a la necesidad cada vez más latente de proteger el medio ambiente, además son una buena opción de inversión sobre todo en países cuya política de renovables está al alza. Algunas de las empresas más interesantes son: Iberdrola, Enel, Acciona Energía, EDP Renovables, RWE y NextEra.
Sector de Consumo de bienes de lujo. Los bienes de lujo es otro de los sectores que continúa crecimiento, marcas como LVMH, Kering, Hermès y Richemont, ofrecen una amplia gama de productos y se prevé que sigan estando al alza en los próximos años.
Sectores financiero y automotriz. Como cada año, el sector financiero y automotriz son dos de los más importantes en cualquier economía. En el mundo financiero, empresas como Bankinter, BBVA, Santander, son una buena opción de inversión, mientras que Volkswagen, BMW y Daimler, despuntan en el sector automotriz. : La transformación digital en el sector financiero, incluyendo pagos digitales, banca en línea y criptomonedas, ofrece oportunidades en empresas que están redefiniendo los servicios financieros.
Sector alimentario, salud y telecomunicaciones. Aunque son sectores totalmente diferentes lo cierto es que son muchos los inversores que se decantan por alguna de estas opciones. Empresas con prestigio a nivel internacional como Nestlé, Danone, Roche, Novartis, Vodafone, Telefónica y Orange, son clave en las inversiones a futuro.
Infraestructura y Construcción: Con el aumento de la urbanización y la mejora de la infraestructura en muchos países emergentes, las empresas en los sectores de construcción e infraestructura podrían ver un crecimiento significativo.
Salud y Biotecnología: La pandemia ha acelerado la innovación en salud y biotecnología. La inversión en empresas que están a la vanguardia de la investigación médica y el desarrollo de tecnologías de salud puede ofrecer un potencial de crecimiento significativo.
Consumo y Retail: La evolución de los patrones de consumo, impulsada por el aumento de la clase media en mercados emergentes y el cambio hacia el comercio electrónico, presenta oportunidades en empresas de retail y consumo que se adaptan a estas tendencias.