Cada día el efectivo parece desvanecerse, pero lo cierto es que no son pocos los que, pese a sucumbir al pago con tarjeta, siguen llevando siempre algún billete o monedas en su cartera para poder salir de cualquier contratiempo. Ya se ha comprobado en alguna ocasión que deberíamos revisar bien las monedas que tenemos en nuestro poder o tiradas por casa, pues algunas debido a sus características pueden valer mucho en el mercado de la numismática. Y lo mismo ocurre con las pesetas. Si eres de los que se quedó con alguna de recuerdo, échales un ojo.
Unas de las más valoradas actualmente, y que mejor se pagan, son las pesetas que tienen grabado el rostro de Franco. Se trata de monedas que han estado décadas en circulación hasta que en 2002 entró en vigor el euro, ya solo con el rostro de Juan Carlos I y, después, el de Felipe VI.
Las monedas de Franco de las que hablamos fueron acuñadas durante las décadas que duró su dictadura, 36 años en los que circularon miles y miles de ejemplares de los que seguramente aún quede alguno que otro en el fondo de un cajón de más de un hogar.
No todas las monedas que tengan grabada la cara de Franco se pagarán igual, ya que va a depender especialmente del estado de conservación que tengan, si cuentan con algún fallo, además de si tienen alguna característica que las haga únicas y originales, o el año de acuñación. Por ejemplo, entre las más buscadas está la que se conoce como ‘peseta Benlliure’, pues fue Mariano Benlliure quien hizo el busto que aparece en la moneda, de 1948 y por la que se ha pagado 7.400 euros.
Sin embargo, la más buscada es otra. En 1949 se acuñó una peseta con el rostro de Franco como era normal, pero en la actualidad es la más cara y por la que más se paga. Es un duro que se ha llegado a subastar por cantidades que han rondado desde los 6.000 euros hasta los 36.000 euros.
Se estima que quedan muy pocas de estas monedas por ahí rondando y para saber su valor hay que fijarse bien en los números que aparecen las estrellas del lado del escudo de la dictadura franquista. Los expertos en numismática tendrán una mayor certeza, pero en general si aparecen el 51 o el 52 puedes estar ante una moneda que te va a dar un buen pellizco, así que atento.