Bien es sabido que las horas extra abusivas y sin remunerar están a la orden del día en las multinacionales de la consultoría y auditoría. Los empleados de este sector realizan jornadas laborales de 12 horas o más, llegando a veces a acumular hasta 80 horas semanales de trabajo. La Inspección de Trabajo y Seguridad Social está determinada a poner fin a esta anomalía. En ese propósito se enmarca la macrorredada simultánea en los edificios de los gigantes de la consultoría Deloitte, PwC, EY y KPMG realizada el pasado mes de noviembre de 2022 para controlar sus horarios laborales, según ha informado 'El Confidencial'.
La vulneración de las jornadas laborales en las 'Big Four' motivó una serie de huelgas convocadas por CCOO y UGT el pasado año para denunciar ese proceder. En la negociación entre los sindicatos y la Asociación de Empresas de Consultoría (AEC), la patronal no ocultaba que su intención era trabajar los sábados sin compensación alguna y ampliar la jornada máxima diaria hasta las 12 horas efectivas. Tras meses de negociación y movilizaciones, el pasado 4 de enero, los representantes de la plantilla y las consultoras llegaron a un preacuerdo sobre el convenio colectivo que no contemplaba esa pretensión de la patronal.
La operación del pasado 15 de noviembre del organismo dependiente de la cartera liderada por Yolanda Díaz parece que sorprendió a las compañías. Algunos empleados destacaron que la inspección asombró tanto que en alguna de las compañías llegaron a desalojar plantas enteras antes de la llegada de los inspectores. La intervención se produjo al mismo tiempo en los rascacielos de las cuatro empresas y duró hasta la madrugada en alguno de ellos. "La investigación sigue su curso sin que se puedan dar detalles sobre la misma”, informan desde el departamento de Yolanda Díaz.
“Si lo que necesitan es cubrir más horas de trabajo diario para cumplir objetivos con los clientes ¿Por qué no contratan gente? Hablamos de empresas que obtienen cantidades ingentes de beneficios, que nos lo expliquen porque no lo entendemos”, apuntaba CCOO en mayo del pasado año.
Las 'Big Four' se defienden esgrimiendo como argumento la cantidad de empleo que generan. Alegan que cada año emplean y forman en torno a 10.000 recién graduados, y recuerdan que han flexibilizado mucho las condiciones de trabajo permitiendo por ejemplo el teletrabajo.
El control del tiempo de trabajo figura entre los objetivos prioritarios de la actuación de la Inspección de Trabajo, según fuentes del Ministerio consultadas por elplural.com. Desde la entrada en vigor del registro de jornada en España, en mayo 2019, se han llevado a cabo en diferentes campañas tanto de control del tiempo de trabajo como de registro de las horas extraordinarias. En el año 2022 se realizaron 32.644 actuaciones en ese sentido. Se detectaron 11.070 infracciones, más del doble que en 2019, que supusieron 13,7 millones de euros en sanciones. La cifra de personas trabajadoras afectadas asciende hasta los 112.884.
El control de las jornadas laborales no solo es relevante desde un punto de vista salarial, también por la salud de las personas trabajadoras. Los máximos de horario y los límites legales en las horas extraordinarias cumplen con la función de garantizar el necesario descanso entre jornadas, clave para la protección de la salud de los empleados.