Tradicionalmente en España se cuelga en verano el cartel de 'cerrado por vacaciones' en casi todos los ámbitos, dando por hecho que todo el mundo se entrega durante los meses de julio y agosto a la playa y la siesta. Es habitual que quien está a la búsqueda de empleo también haga un parón a la espera de retomarla en septiembre, pero la realidad es que las contrataciones cada vez son más frecuentes en esta época del año.
De hecho, una de las principales ventajas que conlleva seguir buscando trabajo en verano es que hay mayores oportunidades laborales y menos competencia. Al haber menos carga de trabajo en las empresas, estas pueden dedicar más tiempo a la formación de nuevos empleados. Y, además, es la época perfecta para conseguir mejores condiciones laborales, según señala la empresa especializada en formación digital Faro Edtech. Estas son las principales razones por las que buscar trabajo en los meses más calurosos es una buena idea:
En septiembre y octubre se producen muchas incorporaciones en el mercado laboral, pero para ello los procesos de selección empiezan ya en junio. Los responsables de Recursos Humanos también se van de vacaciones en verano, por lo que intentan dejar zanjada la renovación del personal de cara al inicio del nuevo curso.
Gran parte de la población se va de vacaciones durante julio y agosto, lo que significa que hay menos competencia en los procesos selectivos. Por ello tu perfil será más visible para los reclutadores y tendrás más opciones de ser entrevistado por la empresa.
En verano los días son más largos, lo que fomenta la predisposición de los candidatos a la formación en determinadas áreas para las que normalmente no tienen tiempo durante el resto del año. Además, tienes más tiempo para mejorar tu CV y hacerlo más atractivo, participar en más procesos selectivos y ensayar tus presentaciones. Esto te dará más confianza y seguridad en ti mismo.
Es cierto que en verano predominan los contratos temporales de sustitución, pero esto también puede tener su parte positiva. Tener un contrato con duración determinada puede ser una gran oportunidad de demostrar las habilidades que tienes y exhibir una actitud proactiva que deje claro tu interés en el puesto. Si dejas una buena impresión tendrás más opciones de conseguir una nueva vacante unos meses después, cuando la empresa esté en disposición de contratar a alguien de forma indefinida.