La jornada laboral de 37 horas y media y sin reducción salarial ya está en camino. El acuerdo que han alcanzado PSOE y Sumar para un nuevo gobierno de coalición incluye esta medida, siempre asociada a la controversia social y que ha condicionado el pacto hasta el último minuto. La propuesta de Sumar era pasar de las 40 horas semanales actuales a las 37,5 entre 2024 y 2025, con el objetivo final de reducir la jornada laboral progresivamente en busca de la semana laboral de cuatro días. Pero, ¿es algo factible? ¿Qué hay que cambiar legalmente para hacerla posible?, y lo más importante, ¿cómo influirá en la práctica esta medida en nuestra nómina? Con la ayuda de nuestro analista económico Javier Ruiz desentrañamos las claves de la reducción de la jornada laboral poniendo la lupa en la letra pequeña.
En primer lugar, esta reforma no solo es posible sino que, en palabras de Ruiz, es "imprescindible". "En España tenemos un problema de productividad, trabajamos muchas horas y nos cunden poco". Nuestra jornada máxima de 40 horas semanales es muy superior a la que se ha generalizado en Europa: en Italia o Irlanda es de 35 horas, en Alemania es de 34,6, en Noruega tienen 34,1 horas y en Austria están en 33,7 horas. Así que en realidad lo que se plantea aquí es ya lo normal en Europa. "Las 40 horas tampoco es que estén escritas en piedra por mandato divino", matiza el experto. "Se fijaron en 1983. Desde entonces hemos avanzado mucho en materia de vida laboral pero en esto no hemos avanzado nada. Se puede reformar, se debe reformar y se va a reformar", añade.
Para legitimar esta reforma a efectos legales, irá a través de un anteproyecto de ley que, como afecta a derechos fundamentales, significará un cambio en el Estatuto de los Trabajadores. Esto se tramitará en el Congreso en 2024, y ya en 2025 las empresas tendrán que hacer obligatorio el cumplimiento de las 37,5 horas. "A partir de ahí entramos en una segunda fase en la que empresarios y sindicatos discutirán si se rebaja todavía más", es decir, si vamos reduciendo progresivamente hasta un umbral de 35 o 32 horas semanales.
Es la pregunta que se pueden hacer muchos escépticos. Si en la práctica la nómina no terminará viéndose afectada de alguna manera por la reducción de horas. Javier Ruiz despeja las dudas. "Tu nómina legalmente debe seguir igual. Si te bajan las horas de trabajo para bajarte el sueldo, lo que están haciendo es bajarte el sueldo. A partir de 2025 vas a trabajar media hora menos al día pero vas a cobrar igual. Si hay rebaja salarial es un incumplimiento de la ley". ¿Y puede afectar a lo que cotizamos a la Seguridad Social? "A efectos de cotización, pensión y salario no cambia nada. Lo único que se modifica es el cómputo de horas semanales a la hora de considerar que tu jornada laboral está completa", aclara el experto.
"A tu jubilación tampoco le afecta porque no se mide por horas trabajadas, sino por jornadas cotizadas. Cotizarás exactamente igual que has cotizado hasta ahora. Si hay cambios en la cotización serán por otras razones, pero no porque se haya recortado la jornada", explica Ruiz.
La aspiración de la semana laboral de cuatro días ya se antoja más ardua porque probablemente contará con la oposición frontal de la patronal y los empresarios. Según un análisis de Infoempleo y el Grupo Adecco, siete de cada diez empresas españolas no ven viable la implantación del modelo de cuatro días de trabajo. Y un 73,51% de las compañías no ve con buenos ojos la rebaja de las horas, aduciendo a la falta de margen de beneficio para mantener los salarios. "Vamos a tener un problema de batalla ideológica porque en este país todo se convierte en una batalla electoral", admite Ruiz.
Tanto en lo personal, lo medioambiental y lo productivo, la reducción de la jornada laboral, que va a afectar a 12 millones de trabajadores, es una buena medida, según nuestro experto.