Cómo se declaran los ingresos de Airbnb en la Declaración de la Renta

  • Todos los propietarios que perciban más de 1.000 euros por el alquiler de un Airbnb deberán incluir los ingresos obtenidos en la Declaración de la Renta

  • Las rentas obtenidas por los apartamentos turísticos deberán incluirse como rendimientos de capital inmobiliario, y los contribuyentes podrán deducir los costes necesarios para poder alquilar la vivienda

  • ¿Dónde está el castillo español del siglo X que se puede alquilar por Airbnb?

La Declaración de la Renta es un trámite por el que la mayoría de trabajadores deben pasar de manera obligatoria cada año, sirve para calcular la liquidación del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), un impuesto directo y progresivo que grava las rentas que se hayan obtenido a lo largo de todo el año fiscal. Para completarlo, los trabajadores deben incluir todas las rentas que hayan percibido a lo largo del ejercicio fiscal, es decir: los rendimientos del trabajo, el capital mobiliario e inmobiliario, los rendimientos derivados del ejercicio de actividades económicas, las ganancias y pérdidas patrimoniales y las imputaciones de renta establecidas por la ley.

Los Airbnb y la Declaración de la Renta

A la hora de completar la Declaración de la Renta, pueden surgirnos ciertas dudas relacionadas con nuestros ingresos, especialmente si obtenemos fondos de actividades no relacionadas con nuestro puesto de trabajo. Ahora que en nuestro país proliferan los Airbnb y apartamentos turísticos, son muchos los que se preguntan si tienen la obligación de declarar los rendimientos obtenidos por estos inmuebles y, en caso afirmativo, de qué manera deberán dar parte de ellos. 

Por norma general, todos los propietarios de este tipo de apartamentos están obligados a declarar los ingresos que hayan percibido por su alquiler, aunque hay excepciones. En concreto, aquellos propietarios que perciban menos de 1.000 euros al año por estos apartamentos están exentos de declarar sus rendimientos, siempre y cuando la suma de las rentas obtenidas por su Airbnb y por su trabajo no superen el límite de 1.000 euros. En cualquier caso, el hecho de declarar estos rendimientos no implica, necesariamente, que se vaya a tener que pagar en la Declaración, ya que en este cálculo entran en cuenta otros rendimientos y deducciones. 

Las rentas obtenidas por los apartamentos turísticos deberán incluirse como rendimientos de capital inmobiliario. A la hora de declararlas, los contribuyentes podrán deducir los costes necesarios para poder alquilar la vivienda, siempre y cuando dispongan de un recibo o factura que justifique este desembolso económico. 

Estos costes incluyen los gastos de limpieza y lavandería del inmueble, las comisiones que puedan cobrarnos las plataformas que gestionan estos alquileres o los costes de la reparación de los elementos que hayan dañado los huéspedes, entre otros. Además, también existen ciertos gastos prorrateables que se pueden imputar parcialmente a la actividad del alquiler, como los gastos de la comunidad de vecinos, los impuestos vinculados a la vivienda o los suministros básicos del inmueble.