La paradoja de la vivienda en España es más acusada que nunca. Hay más casas de las que se necesitan. Concretamente, 433.000 unidades. Sin embargo, este superávit no es generalizado, sino que en trece provincias la situación es justo la contraria: faltan 327.000, según un estudio realizado por UVE Valoraciones. Así que el país se rompe en dos mitades. Por un lado están las zonas donde es urgente construir viviendas y, por otro, aquellas en las que la demanda no es capaz de cubrir la oferta existente. "La falta de vivienda no es un problema nacional, es un problema de determinadas zonas", asegura Germán Pérez Barrio, presidente de la tasadora autora del informe.
La necesidad de vivienda se concentra en las áreas metropolitanas de las principales ciudades del país y de las que tienen un fuerte componente turístico. Madrid lidera el déficit de casas, con alrededor de 107.000, el 3,4% del parque existente. Le sigue Barcelona, donde se necesitan casi 85.000, y Valencia, con 64.500. Estas tres aglomeraciones, sumadas al déficit de 46.413 de Baleares, los 25.000 de Murcia y los 16.000 de Málaga, explican casi todo el fenómeno de escasez en el país.
Las ciudades donde estas cifras suponen un porcentaje mayor del censo son Palma, donde las viviendas que habría que construir suponen el 8,8% de las que ya existen; Murcia, donde es el 8,45% del parque, o Valencia, el 7%. "En estas áreas construir vivienda nueva ayudaría, sino a bajar los precios, al menos a que dejen de subir", señaló Pérez Barrio.
Sin embargo, fuera de estas zonas tan concurridas la situación es completamente distinta y en lugar de hacer falta, sobran casas. Son las zonas azotadas por la despoblación, las que conforman la llamada España vaciada. La provincia de Ourense presenta el mayor superávit del país, con el 20,72% del parque. Le siguen Ciudad Real (18,85%), Segovia (17,18%), Cuenca (15,77%), Lugo (15,65%) y Ávila (12,84%). También superan la barrera del 10% Guadalajara (12,78%), Teruel (12,59%), Toledo (11,66%), León (11,22%), Zamora (10,75%) y Soria (10,22%). Según el presidente de UVE Valoraciones, estas zonas son "lugares donde no se debe construir en los próximos diez años".
El informe también concluye que los lugares donde hay menos inmuebles desocupados y hay más déficit son los que tienen los precios más altos. Así, las provincias de Madrid y Guipúzcoa tienen los precios más altos del país y están entre los cinco donde menos viviendas están desocupadas y sin uso. En el extremo contrario, en Ourense solo uno de cada dos inmuebles construidos se utilizan, y tiene el precio medio más barato de toda España.
Para el análisis, la tasadora ha tomado como referencia el último censo de vivienda que publicó el INE el pasado mes de junio y que se realizó con los datos de 2020, por lo que en las provincias con más actividad turística los cálculos "no son fiables" y algunos resultados que muestran un superávit "podrían enmascarar déficits y algunos déficits pequeños podrían ser mayores".