Llegan las bajas temperaturas. Las calefacciones. El tener cerradas las ventanas para no perder el calor de la casa. Para gastar menos en la factura mensual de energía. Todo esto podría ser válido para cualquier año "normal", pero ahora, en mitad de una pandemia, con un virus que parece que también se distribuye por el aire en aerosoles y con los contagios que no paran de crecer, la ventilación de las estancias se convierte en crucial para detener la propagación del virus y evitar caer en sus fauces.
Es, sin duda, la solución más barata y sencilla para luchar contra el SARS-CoV2, y algunos líderes políticos ya se lo están recomendado fervientemente a sus ciudadanos. La última en sumarse a este sencillo consejo ha sido Angela Merkel, cuyo Gobierno ha distribuido una guía sobre cómo se debe ventilar bien un hogar o una oficina. En Reino Unido también han actualizado sus protocolos para ventilar especialmente las estancias donde se reúnan varias personas al mismo tiempo. ¿Y en España?
En nuestro país, por el momento, el debate no está en si ventilar o no ventilar, si no en si el virus se distribuye por el aire o no, como han demostrado en Estados Unidos. Las últimas declaraciones al respecto de Fernando Simón apunta a que "no hay evidencias sólidas de que haya habido transmisión probada por aerosoles en medios sociales normales", aunque indica que el Ministerio de Sanidad ya recomienda ventilar las estancias desde el protocolo del 11 de abril.
Así, ante la llegada del frío y la necesidad de ventilar las estancias, en Uppers hemos hecho una breve guía desde el prisma de la eficiencia energética y también desde el contexto sanitario actual. Para ello hemos preguntado a Daniel Sanz, experto en eficiencia energética, y a José María Ordóñez Iriarte, profesor de Salud Pública y miembro de la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria.
Daniel Sanz (experto en eficiencia energética): siempre se recomienda primerísima hora, cuanto antes y se recomienda por el tema de calefacción porque por la noche la casa puede bajar de temperatura pero durante el día hay que encender la calefacción. Por eso cuanto antes, mejor. Si por la noche la casa está a unos 17 grados y por el día a unos 21, va a provocar menos diferencia de temperatura ventilar a primera hora que a mitad del día.
J.M. Ordóñez (experto en salud pública): por las mañanas es fundamental porque hemos estado descansando en los diferentes habitáculos de la casa y con eso mejoras el aire interior y la expulsión de posibles virus o agentes. En familias que tienen que estar en confinamiento es necesario que hagan una ventilación con determinada periodicidad. No hay una pauta o una ley que diga cuántas veces hay que ventilar. Cada uno tiene que valorar un poco cuáles son las condiciones en las que está, personas que están en casa... Lo importante es hacer una ventilación con una determinada periodicidad para disminuir la concentración del propio virus.
Experto en eficiencia energética: Sí, siempre es mejor ventilarlo todo. Es lo que se llama forzar la ventilación y es lo más recomendable. Nunca ir por habitaciones ni dejar las ventanas abiertas dos horas: abres todas las ventanas de la casa, o en partes opuestas, y así se genera una corriente de aire que renueva el aire más rápido.
Experto en salud pública: al margen de que estemos en una situación de pandemia la ventilación siempre es necesaria. No de continuo pero sí de 10 minutos para mejorar la calidad del aire interior. Se está recomendado la ventilación en espacios interiores donde pueda haber una presencia de personas porque puede haber transmisores y en la medida que se haga una buena ventilación se diluye la concentración del virus y disminuye la transmisión.
Experto en eficiencia energética: es mejor abrirlas de par en par y cuanto menos tiempo esté ventilando, mejor. Si está una rendijita abierta durante dos, tres horas, al final vas a perder más energía del interior que haciéndolo de golpe durante 10 o 15 minutos una vez al día.
Experto en salud pública: sí, mejor abrirlas y que haya corriente para que haya la entrada de nuevo aire, aunque ahora se produce un fenómeno de gradiente de temperatura, al haber más frío fuera que dentro, el aire interor sale con mucha más facilidad y se renueva mejor. No hay que hacer virguerías.
Experto en eficiencia energética: si puedes ventilar antes de encender la calefacción, mejor. A la hora de ventilar puedes renovar el aire y cuando dejas de ventilar la calefacción solo tiene que calentar el aire que queda nuevo. Si lo dejas más tiempo, además baja la temperatura de las paredes, el suelo, los muebles y la calefacción luego tiene que calentar más y consumes más.
Experto en salud pública: es recomendable, aunque tampoco influye demasiado, porque si se genera una corriente disminuye el tiempo de renovación, aunque no es lo mismo la época estival o la época de invierno. Ahora, por las diferencias de temperatura, ya abriendo las ventanas sin necesidad de corriente va a haber una expulsión del aire caliente del interior. También se pueden usar otro tipo de gadgets para saber cuándo abrir, como los medidores de CO2, aunque mi opinión es que no tenemos que ir aplicando en el ámbito familiar más tecnología que la normal. En oficinas sí que puede haber medidores de CO2 para que indique de cuál es el grado de concentración que existe y que sirva de pauta para establecer las ventilaciones necesarias, pero eso es sobre todo donde hay un aire acondicionado o una bomba de calor. En un hogar me parece un despropósito.