Cuando hablamos de cremas hidratantes, la gran pregunta es si valen lo que cuestan. Mientras que algunos dermatólogos apuestan por la sencillez de los principios activos, otros formulan carísimos productos justificando el precio por lo escaso de sus componentes o los estudios científicos que hay detrás de cada envase.
Las redes, siempre ávidas de polémica, han acogido con gusto este 'duelo' entre las económicas cremas de toda la vida y las ultra caras. En Tik Tok e Instagram, algunas usuarias se preguntan si realmente hay tanta diferencia entre la crema Nivea, la crema por antonomasia, o la famosa crema hidratante de La Mer, una de las más caras del mercado. La dermatóloga Doris Day, muy conocida en Estados Unidos por sus podcasts y sus apariciones en televisión ha aportado sus conocimientos sobre este tema.
Si hay un logo clásico de nuestro tiempo (además del de Coca Cola), es el de Nivea. Su logo y su inconfundible color: el azul klein de la mayoría de sus productos. Agua, parafina, cera, glicerina, lanolina y panthenol, cada uno en distintas formas y composiciones, son los ingredientes fundamentales de la crema hidratante Nivea. El ungüento lo mismo sirve para hidratar que para proteger o regenerar. Famosas como Carmen Lomana admiten tenerla entre sus favoritas y casi todos la hemos usado en algún momento. Para redondear la ecuación, está producida por los laboratorios Beiersdorf AG de Hamburgo, fue la primera en su clase, allá por los inicios de siglo XX, y su precio es más que asequible. Pero, con una industria cosmética cada vez más avanzada, ¿puede competir con las nuevas (y carísimas) generaciones de cremas?
Como explica la propia compañía en su web, la historia de La Mer, hoy propiedad de Estée Lauder, comienza cuando, en un accidente de laboratorio, el doctor y físico aeroespacial Max Huber sufrió unas quemaduras que le empujarían a cambiar su propio destino. El científico esperaba poder liberar los poderes regeneradores del mar, fuente de micronutrientes esenciales, en un solo producto.
Una serie de 6000 experimentos y 12 años de investigación dieron fruto con un descubrimiento que transformó su vida para siempre: un proceso de fermentación que transformaba el alga kelp y otros ingredientes puros en Miracle Broth, literalmente el 'caldo milagroso'. Este elixir que regeneraba las células, el principal componente de Crème de la Mer, consiguió transformar el aspecto de su piel y el de millones de mujeres desde 1965. La crema, por tanto, cumplirá el año que viene 60 años.
Volvemos a la casilla de salida. Un bote de crema Nivea de 100 mililitros ronda los cuatro euros. Un bote similar de La Mer, los 400. El desfase es casi del 200%. ¿Hay tanta diferencia en cuanto a resultados? Para la doctora Day, el veredicto es claro: "Ambas son buenas", explica en su post de Instagram.
En opinión de esta experta, no son cremas comparables. "Nivea es un buen producto. La gente ha usado esta crema durante toda la vida y la mayoría tiene una piel suave e hidratada", afirma. ¿Qué le diferencia de La Mer? "La Mer tiene principios activos realmente especiales. Hay mucha investigación detrás de sus ingredientes marinos. Y son esos compuestos del océano y las evidencias científicas que sostienen su eficacia lo que la convierten en lo que es".
La doctora Day, sin embargo, no apuesta decididamente por una. "Hay muchas maneras de tener una piel sana y bonita. Comprarse La Mer es hacer un dispendio, pero si te lo puedes permitir, lo vale. Por su parte, Nivea es un buen producto y supone un ahorro extraordinario si se compara con lo que hacen otras cremas", concluye la experta.