{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
A pesar de los tabús y de algunos factores culturales, las personas con más de 60 años no deberían renunciar a tener sexo y mucho menos a todos los beneficios que ello reporta en el cuerpo y mente, porque nunca es tarde para disfrutar del sexo.
Mantener relaciones sexuales en pareja, sin importar la edad que se tenga, tienen multitud de beneficios y más a partir de los 60 años, pues es una excelente forma de mantenerse activos. El sexo a partir de esta edad previene el riesgo de obesidad, reduce la posibilidad de desarrollar problemas cardiovasculares y respiratorios, siempre que no se utilicen fármacos para aumentar la potencia sexual. En el caso de los hombres ayuda a disminuir el riesgo de tener cáncer de próstata y además gracias a las endorfinas los dolores pueden llegar a disminuir aumentando la sensación de relajación.
Diversos estudios han concluido que los mayores sexualmente activos mejoran su funcionamiento cognitivo. Por todos estos factores, las personas maduras que no renuncian al sexo suelen vivir más felices.
Un nuevo estudio del Instituto Kinsey, en colaboración con la publicación Cosmopolitan, ha determinado que el placer femenino una vez pasados los 60 años está muy infrarrepresentado en todas esas películas y series de televisión, pues alcanza su cenit en esta etapa de la vida, no solo en cantidad, pues muchas se vuelven más sexualmente activas, sino también en calidad llegando a disfrutar de mejores orgasmos.
El estudio se basó en las encuestas de 3.001 mujeres estadounidenses. Casi tres cuartas partes aseguraron que la edad no tenía en absoluto ningún impacto negativo en la calidad de sus orgasmos, el 20% confirmó que estos momentos de placer intenso eran más espectaculares que nunca y un 57% reconoció que siempre o casi siempre alcanzan ese clímax con sus parejas, como recoge la revista Prevention, que se ha hecho eco del estudio.
El estudio "Seniors, Pasión y Sexo", de Pikolin entre personas mayores de 60 años, revela los tabúes, de los españoles, que aún existen sobre la sexualidad en este momento de la vida. El estudio concluye que, 8 de cada 10 encuestados creen que "a la gente joven le da vergüenza que nuestra generación hable de sexo" y el 89% afirma que los jóvenes subestiman sus vidas sexuales.
Para 2 de cada 3 personas mayores de 60 años, el sexo y la pasión son igual o más importantes que hace unos años, y el 68% de los encuestados disfruta del sexo igual o más que antes.
Además, el 91% de los españoles de estas edades defiende que, con el paso del tiempo, se prefiere la calidad a la cantidad en las relaciones sexuales. El 82% de los encuestados se considera satisfecho con su vida sexual, y más de la mitad (58%) se considera muy satisfecho. Sin embargo, un 65% desearía poder hablar más abiertamente de sexo, aunque creen que sigue siendo un tema mal visto socialmente.
La mitad de los españoles mayores de 60 años tiene relaciones sexuales todos los meses, y un 21% lo hace semanalmente. El 77% reconoce practicar menos sexo que antes, el 47% lo vive con más tranquilidad que en su juventud y el 12% lo hace con más pasión. El deseo sexual permanece fuerte, ya que el 44% afirma que su apetito sexual no ha disminuido.
Mantenerse activo sexualmente a partir de los 60 no solo es necesario, para ello, y para que las relaciones sean lo más satisfactorias posibles, se debe:
Es fundamental no obsesionarse, cada pareja tiene sus ritmos y gustos, lo más importante es la satisfacción y el bienestar de cada persona y pareja. Adaptarse a los cambios y mantener una comunicación abierta son claves para una vida sexual plena y gratificante siempre pero más a partir de los 60. La intimidad y el deseo no desaparecen con la edad; solo se transforman y continúan siendo una parte esencial y necesario del ser humano.