Es el brebaje con más mitos a sus espaldas, desde la tripa cervecera hasta la famosa teoría de que la cerveza embotellada es mejor que la de lata. Pero la cebada líquida no deja de ser la bebida más consumida en el mundo, sino también una de nuestras favoritas. Seguro que llevas tiempo esperando esta noticia, la cerveza mejora las relaciones sexuales.
Se trata de una conclusión avalada por la sexóloga Kat Van Kirk quien trata su sorprendente descubrimiento en su libro ‘The Married Sex Solution: A Realistic Guide to Saving Your Sex Life’. La doctora afincada en Los Ángeles describe diferentes maneras por las que el consumo de cerveza puede potenciar el deseo en el hombre así como mejorar su rendimiento global en la cama. ¡Ya no hay excusas para volver pronto del bar!
La cerveza está elaborada a partir de ingredientes naturales –agua, cebada y lúpulo- y con bajo contenido en calorías y en alcohol. Además, no contiene grasas ni azúcares. En cambio, posee una cantidad significativa de hidratos de carbono, vitaminas, fibras, proteínas y minerales como el silicio, potasio, magnesio y sodio, por lo que el consumo sin excesos resulta más que recomendable para nuestra salud. Y es que además de ayudar a nuestro corazón, a nuestros riñones, a nuestros huesos... un consumo moderado de esta bebida puede ayudarnos a lograr que nuestras relaciones sexuales sean más satisfactorias.
Los fitoestrógenos -compuestos químicos no esteroideos, que se encuentran en los vegetales pero son similares a los estrógenos humanos- presentes en la cerveza no solo permiten ayudar a que nuestros huesos se mantengan en buen estado, tal y como han constatado numerosos estudios médicos, sino que en el caso de los hombres parece ser que también son responsables de retrasar la llegada del orgasmo.
Son numerosas las investigaciones que han constatado los efectos positivos que un consumo moderado de cerveza tiene para nuestra salud cardiovascular. Esto significa que los consumidores de esta bebida milenaria son capaces de hacer mayores esfuerzos cansándose menos, algo que resulta beneficioso en la cama porque aumenta la duración y la intensidad de las relaciones sexuales.
Muchos alimentos y bebidas poseen propiedades afrodisíacas. En este caso, la cerveza no es una excepción. Su consumo ayuda a reducir las inhibiciones y a aumentar la libido y el deseo sexual. De entre las distintas variantes de cervezas, varios estudios indican que la cerveza negra es la más apropiada para potenciar sus efectos afrodisíacos gracias a sus mayores aportes de hierro –que hace que se produzca hemoglobina, encargada de llevar oxígeno a todo el cuerpo-, lo que favorece erecciones más largas e intensas.
Las propiedades de la cerveza, que aporta gran cantidad de vitaminas del grupo B y probióticos, ayudan a fortalecer la salud y a asentar el estómago. Estas propiedades ayudan a combatir la pesadez y por tanto facilitan una mayor predisposición hacia las relaciones sexuales.
Además debemos tener en cuenta que la cerveza tostada es un gran afrodisíaco ya que posee más hierro que la rubia, lo que ayuda a entrar en calor. Esta cerveza incrementa el número de glóbulos rojos y aumenta la circulación global de la sangre, ocasionando que las erecciones se den con más frecuencia y con facilidad. La negra es buena para el estómago gracias a sus vitaminas, minerales y cualidades probióticas.
El alcohol tiende a relajar el cuerpo, y una persona que ha bebido un poco suele concentrarse más en el momento, además de tener los músculos menos tensos, lo que permite que tanto en el hombre como en la mujer los orgasmos sean más intensos.
También puedes utilizar la cerveza para hacer algunos juegos antes del sexo. Ya sea con chupitos, o simplemente divirtiéndote con ella y el cuerpo de tu pareja.