¿Qué hago con mi gato en vacaciones? Consejos de experto si un vecino te lo cuida

Llega el momento de coger las tan ansiadas vacaciones y surge la duda de qué hacer con el gato. ¿Lo llevamos con nosotros? ¿Lo dejamos tranquilamente solo en casa? ¿Se lo dejamos a alguien? La elección adecuada depende de la personalidad del minino, del tiempo que vayamos a pasar fuera y de las posibilidades que tengamos de que nos echen una mano, pero en general un gato, al igual que un perro, necesita que alguien le cuide. Que sea aparentemente más independiente no significa que no requiera atenciones.

Para saber qué hacer con nuestro gato en vacaciones nos hemos puesto en contacto con el experto Carlos Carrasco, educador canino y director de DOS adiestramiento, que participó en el evento #JuntosContraElAbandono2023 promovido por Nextdoor para sensibilizar sobre el problema del abandono animal, y hemos puesto sobre la mesa las dudas más habituales.

Los gatos son animales de rutinas muy definidas. ¿Cuál sería la opción ideal si nos vamos de vacaciones y no podemos llevarlo?

Dejarlo en casa y que una persona de confianza venga cada día a ponerle comida y limpiar su arenero. 

Si opto por esa opción, ¿qué puntos debo tener en cuenta para que se encuentre tranquilo?

La casa debe estar “gatunizada”, esto es organizada en zonas: descanso, alimentación, eliminación, zonas de interacción social y puntos de rascado. Además, es importante que ahora en verano asegurarnos de que la temperatura es óptima y que el animal tenga varios puntos de agua fresca.

Si un familiar o vecino se ofrece a visitar al animal regularmente, ¿qué recomendaciones le podemos hacer?

Básicamente que no agobien al gato y que, si el animal no está por la labor, interactúen con él lo menos posible. 

Si son unas vacaciones largas y un vecino se ofrece a cuidarlo en su casa, ¿qué consejos debería tener en cuenta para que se adapte?

Mejor que el gato permanezca en su hogar, le supondrá menos estrés. 

Si no nos queda más remedio que dejárselo al vecino, ¿qué ocurre si este también tiene un gato? 

Que, en caso de no contar con la formación adecuada, es mejor que deje a nuestro gato en nuestra casa y venga diariamente a ponerle comida y limpiar su arenero. Los gatos son animales muy territoriales: al estrés de nuestra mascota por encontrarse en un nuevo entorno, sumaríamos el estrés del gato que vive en esa casa por recibir un intruso. Mal empezamos. 

¿Y si tiene un perro?

Misma respuesta que la anterior. Nuestro gato mejor en nuestra casa. 

¿Qué opciones tenemos si no contamos con un vecino, amigo o familiar que nos pueda ayudar? 

Llevar al gato de vacaciones (si previamente está habituado a viajar en su transportín) o, llegado el caso, contactar con alguna empresa que preste servicio de catsitter.