Llega una época del año en la que se coge el coche más de lo habitual. En verano aumentan los desplazamientos, tanto por carretera como en ciudad. Ya sea por vacaciones o por realizar una escapada durante el fin de semana. Ya está aquí el verano. El sol, el calor… Llega la anhelada época de relax, de disfrute, de diversión, pero… el coche puede jugarnos una mala pasada.
Un coche está formado por multitud de piezas, algunas más caras que otras. Y como todo aparato, es susceptible de sufrir averías, esas que tanto temen los conductores. La mayoría son evitables llevando a cabo unos buenos hábitos de conducción y un mantenimiento preventivo del vehículo en tu taller de confianza. De no cuidar el coche, es más probable que éste sufra algún fallo, alguno de ellos bastante costoso.
Hay cinco averías que todo conductor quiere evitar, no sólo por el hecho de quedarse unos días sin coche sino también por el elevado coste de su reparación, que puede oscilar entre los 250 euros, la más barata, a los 5.000 euros la más cara, sin sumarle la mano de obra.
Se encarga de permitir el cierre de las cámaras de combustión, y es fundamental para el funcionamiento global del motor. Su reparación conlleva unas más de quince horas de mano de obra. Para evitar problemas con este componente, es imprescindible realizar los cambios de aceite y refrigerante en su momento, así como controlar que sus niveles son siempre los adecuados. Puede costar unos 3.605 €
Requiere unas cinco horas de reparación y un coste de unos 2.990 €, pero su alto precio se debe a que se trata de un sistema caro en sí mismo. Lo utilizan sobre todo vehículos de gama deportiva, pues el turbo se encarga de sobrealimentar el motor para que rinda más. Por ello, hay que respetar una serie de consejos para que dicha sobrealimentación no sea excesiva y derive en una avería. Sobre todo, hacer un uso inteligente del ralentí: dejar el coche en ese estado durante 30 segundos antes de emprender la marcha y otros 30 segundos antes de apagar el motor al finalizar la conducción, con el fin de regular su temperatura. También se recomienda no realizar una conducción demasiado brusca.
Esta pieza, de carácter circular, regula el giro del cigüeñal, manteniéndolo constante. Hoy en día también funcionan los llamados volantes motor bimasa. La pieza en sí no es barata, unos 1.775 €, aunque tampoco es tan cara como otras. El problema es que su avería requiere de mucho tiempo de reparación cera de 12 horas, pues implica el desmontaje y montaje de otros elementos de la distribución y del motor en sí. Te aconsejamos acudir al taller si empiezas a notar que cada vez te cuesta más meter las marchas, con vibraciones en el pedal del embrague.
Es otra avería costosa por sus piezas, y no tanto por su mano de obra, pues apenas se necesita una hora y media de trabajo, unos 1.754 € en total. Es una parte fundamental en el proceso de combustión del motor, introduciendo carburante pulverizado en la cámara con aire a tal efecto. Debes tener en cuenta tres consejos: no te retrases en el cambio de filtro de combustible y reposta en gasolineras de confianza.
Es el eje con codos y contrapesos que transforma el movimiento rectilíneo alternativo en otro de carácter circular uniforme. Normalmente, la avería supone el cambio del retén del cigüeñal, una pieza que no es cara, pero al igual que ocurre con el volante motor, es difícil llegar hasta ella, por lo que hay que desmontar y montar numerosos elementos del motor. Suele implicar unas 18 horas de mano de obra y un precio alrededor de 1.680 €. Es una de las partes por las que el motor puede perder aceite, así que debes acudir al taller si notas alguna fuga, por pequeña que sea.
Para evitar las reparaciones más caras de un coche, lo fundamental es llevar un correcto mantenimiento y pasar por el taller cuando corresponda. Si escuchamos ruidos raros, por ejemplo, o si el coche echa humo de algún color extraño, entre otras cosas, será clave para que las averías se detecten tan pronto como sea posible y, de ese modo, no nos salgan tan caras.