Coches eléctricos, coches híbridos, coches compartidos, pequeños, eficientes, poco potentes… todo para que consuman poco y emitan pocas partículas nocivas a la atmósfera, respetando el medio ambiente. El futuro de la conducción está más cerca de lo que parece, y lo que para muchos es un placer y un momento de evasión, meterse en el coche, darle al contacto y pisar a fondo para liberar tensiones y sentir la adrenalina de la velocidad, parece que está en peligro de extinción. O no. Eso es precisamente lo que hemos preguntado a los expertos.
Aunque estamos a la última y no nos sorprende que cada vez más las nuevas tecnologías busquen un mundo más limpio con nuevas formas de movilidad más respetuosas con el medio ambiente, seguimos disfrutando con el rugido de un motor V8, o incluso la dulce melodía de un V6. Al fin y al cabo hemos crecido al calor y al olor de la gasolina.
Muchos pueden pensar que la ecología aplicada al universo de los coches y a la movilidad, se va a cargar, literalmente, el placer de conducir. Sin ir más lejos, éste que escribe ha probado coches híbridos y eléctricos como el Hyundai Ioniq, el Kia Nio, el Renault Zoe, el Nissan Leaf o el Smart EQ ForTwo. Y sí, la verdad es que es complicado disfrutar al volante cuando vas más pendiente de la autonomía que te resta para no quedarte tirado y en vez de pisar el acelerador lo acaricias con más mimo que a tu pareja.
Pero afortunadamente hay marcas que se rebelan ante la fatalidad de lo que sería un mundo sin pasión al volante, y a pesar de apostar por la hibridación, motores de combustión complementando a motores eléctricos o incluso coches que solo se mueven con electricidad, podemos seguir teniendo un mínimo de placer a los mandos.
Si hablamos de coches eléctricos cien por cien, el pionero en estas lides es el BMW i3. Este pequeño de 4 metros de largo cuenta con 184 caballos de potencia y aunque pisar a fondo supone reducir la duración de su batería, el bravo alemán ofrece sensaciones deportivas y un tacto realmente satisfactorio.
Hablando de coches eléctricos con toque deportivo, no podemos dejar de hablar de Tesla, que mientras prepara un Roadster, el Model S o el Model 3 se comportan realmente bien cuando pisas a fondo. Jaguar, Mercedes, Audi, Volkswagen… poco a poco todas las marcas han puesto en el mercado vehículos potentes puramente eléctricos, y anuncian a corto plazo más y mejores opciones para no aburrirse al volante.
Pero no podemos terminar este alegato a favor de los coches cuidadosos con el medio ambiente que no renuncian a las sensaciones y a la deportividad sin mencionar algunos híbridos que hemos probado y nos han dejado con la boca abierta. Los casi 400 caballos del Volvo XC60 T8 permiten darse una alegría… y dos y tres. En el catálogo de Lexus también tenemos opciones deportivas como el RC o el LC que no te dejan indiferente.
Pero sin duda nunca olvidarás la primera vez que te pongas a los mandos de un híbrido como el BMW i8, que también tiene versión descapotable. Sus 374 caballos y su chasis de fibra de carbono hacen que este bólido alcance los 250 kilómetros por hora y acelere de cero a cien kilómetros por hora en sólo 4,4 segundos. Quizá es el mejor ejemplo de que la moda Eco no está reñida con el placer de conducir y las sensaciones deportivas al volante. ¡A eco disfrutar!