En teoría, los entrenadores personales están para hacernos mejores, tanto en el terreno físico como en el mental. Pero eso no significa que los 'coach' no puedan sacar partido a su trabajo y extraer algún tipo de aprendizaje de las personas que tienen a cargo, de la misma forma que un sénior puede incorporar a su vida diaria alguna lección de los más jóvenes. De estas dos premisas nace 'Implacable' (Alienta Editorial, 2021), una lectura en la que Tim Grover (56 años), preparador físico de grandes estrellas de la NBA como Michael Jordan, Kobe Bryant o Dwayne Wade, anota el secreto del éxito de los deportistas a los que un día ayudó.
Lo hace a través de 14 capítulos en los que repasa anécdotas y vivencias que tuvieron lugar durante el asesoramiento que ofreció a estos grandes deportistas. En ellos acuña el término 'cleaner', una palabra que viene a definir la personalidad mental de los atletas más ambiciosos. De ahí se extrae una suerte de decálogo que incorpora analogías de baloncesto ("entrar en zona"). Estas son las conclusiones:
1. Cuanto más cleaner eres, más amenazante eres.
2. Cuando eres un cleaner, sigues esforzándote aún más cuando todos los demás ya han tenido bastante.
3. Cuando eres un cleaner te concentras, entras en la zona, dejas todo lo demás fuera y controlas.
4. Cuando eres un cleaner, sabes exactamente quién eres.
5. Cuando eres un cleaner, tienes un lado oscuro que se niega a que le enseñen a ser bueno.
6. Cuando eres un cleaner, la presión no te intimida: te creces con ella.
7. Cuando eres un cleaner y alguien pulsa el botón de "en caso de emergencia", te buscan a ti.
8. Cuando eres un cleaner, no compites con nadie: encuentras la debilidad de tu oponente y atacas.
9. Cuando eres un cleaner, tomas decisiones, no aceptas sugerencias; sabes la respuesta mientras todos los demás siguen haciéndose preguntas.
10. Cuando eres un cleaner no tiene por qué gustarte el trabajo, pero eres adicto a los resultados.
11. Cuando eres un cleaner prefieres que te teman a gustar y caer bien.
12. Cuando eres un cleaner confías en muy poca gente, y aquellos en quienes más confías nunca te decepcionan.
13. Cuando eres un cleaner no reconoces el fracaso; sabes que hay más de una manera de conseguir lo que quieres.
14. Cuando eres un cleaner no celebras tus logros, porque siempre quieres más.
Los apuntes de Grover señalan, de esta forma, el funcionamiento de la psique de los jugadores de baloncesto a los que ayudó con su físico, casos extrapolables también a los grandes deportistas de la historia. La mentalidad de ganador insaciable se mezcla con una grandísima preparación física. Son aspectos que van de la mano y constituyen una máxima: solo cuando estás preparado a nivel psicológico y físico puedes aspirar a ser el mejor.
Quizá sea ese el gran secreto: el perfecto equilibrio entre cuerpo y mente, unido a una ambición a la que es inútil poner cercos. Se entiende, de esta forma, que Michael Jordan consiguiese ganar seis anillos de la NBA y cinco títulos de MVP (Most Valorated Player, mejor jugador de la temporada). O que Kobe Bryant alcanzase la friolera de cinco anillos. O que Dwayne Wade se hiciese con tres títulos de la NBA.