Ser agradecida es la clave para que las mujeres vivan más años, según Harvard

Ya sabemos que si incorporamos ciertos hábitos a nuestro día a día, como hacer ejercicio, llevar una dieta adecuada o eliminar el tabaco podemos alargar nuestra vida varios años, pero un nuevo estudio elaborado por  la Universidad de Harvard y publicado en la revista JAMA Psychiatry ha revelado una sorprendente y nueva clave para la longevidad: la gratitud. Aunque el informe solo ha probado su eficacia en las mujeres.

"Investigaciones anteriores habían mostrado una asociación entre la gratitud y un menor riesgo de angustia mental y un mayor bienestar emocional y social. Sin embargo, su asociación con la salud física era menos comprendida", ha explicado el autor principal del estudio, Ying Chen, científico investigador del Departamento de Epidemiología de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard.

En el estudio, que es pionero en su enfoque, han participado un total de 49.275 mujeres mayores que han completado un 'Cuestionario de Gratitud'. Consistía en reflejar si estaban de acuerdo o en desacuerdo con afirmaciones del tipo: "Tengo mucho en la vida por lo que estar agradecida" y "Si tuviera que enumerar todo lo que me siento agradecida, sería una lista muy larga".

Los resultados, tras un análisis muy concienzudo de todos los factores, fueron concluyentes: aquellas mujeres con mayores puntuaciones de gratitud tenían un 9% menos de riesgo de mortalidad en los siguientes cuatro años, especialmente en lo relativo a enfermedades cardiovasculares.

La gratitud como rasgo

El estudio de Harvard sugiere que cuando las mujeres se sienten agradecidas por lo que tienen, su calidad de vida mejora. Entendiendo la gratitud como una tendencia a notar y responder con actitud positiva a las experiencias que nos ofrece la vida. Aquellas personas con una mayor disposición agradecida son más propensas a experimentar estados emocionales de gratitud en un momento dado. Es decir, que la gratitud implica 2 pasos:

  1. Reconocer una experiencia o resultado positivo.
  2. Atribuir ese resultado positivo a una fuente externa como personas, circunstancias, etc.

Así, la gratitud fomenta pensamientos y acciones que benefician a nuestra salud física y psíquica, como tener un sentido de propósito en la vida, practicar estilos de vida saludables o comportamientos prosociales. "Estas actividades fomentan el crecimiento de los recursos psicológicos, físicos y sociales, lo que inicia una espiral positiva que conduce a una mejor salud", señala el estudio.

Cómo trabajar la gratitud

Lo mejor de la gratitud es que es una emoción que se puede cultivar. En ese sentido, los expertos de Atlantic Health System nos ofrecen algunos consejos para trabajar la gratitud y tener una vida más plena:

  • Haz inventario de tus logros. Tómate el tiempo para valorar tus progresos, ya sean pequeños pasos o grandes conquistas. Es importante que hagas una pausa para apreciar aquello por lo que has trabajado y sentirte agradecido por que tu esfuerzo ha merecido la pena.
  • Observa qué tienes que dejar ir. Puedes sentirte agradecido incluso por lo que obtienes de las lecciones más duras de la vida. Estas te ayudan a decidir si ciertas metas y objetivos siguen siendo importantes. Deja atrás los viejos hábitos, creencias o rutinas que ya no te sirvan.
  • Presta atención a quienes te rodean. Las relaciones son cambiantes, pero debes observar qué amistades y familiares te alimentan realmente el alma y si necesitan que les prestes más atención. Y, por el contrario, valora con cuáles sería mejor poner un poco de distancia.
  • Aprecia lo que tienes. Tienes que aprende a disfrutar de los pequeños momentos de la vida. Puedes empezar a escribir un diario sobre las cosas por las que estás agradecido a la vida. Verás cómo esa lista crece con el tiempo.