Entre guerras y subidas de precios, desde el fin de la obligatoriedad de las mascarillas en interiores la covid-19 ha pasado a un segundo plano. No obstante, el virus sigue circulando y muchos expertos aconsejan que la mascarilla en interiores siga siendo utilizada por ciertos sectores de la población, como los mayores de 60 años o las personas de riesgo. Si nos vamos a los datos, el 12 de abril la incidencia acumulada a 14 días en mayores de 60 años era de 435 casos por 100.000 habitantes, una semana después, el día 19, justo tras la Semana Santa y el día que se aprobaba la norma sobre el cubrebocas, la incidencia había escalado a los 505 casos por 100.000 habitantes.
Desde el fin de la mascarilla, coincidiendo con la vuelta de Semana Santa, la incidencia a 14 días en mayores de 60 años continúa escalando. El día 22 de abril se situaba en 555 casos por 100.000 habitantes y el día 26 ya había alcanzado los 608 puntos de incidencia. Este mismo martes el ministerio de Sanidad sumaba 47.421 nuevos casos de covid y prácticamente la mitad, 23.137, correspondían a mayores de 60 años. Preocupan, sobre todo, los mayores de 80, con una incidencia de 796 puntos
No obstante, no todas las regiones españolas se han visto afectadas de la misma forma. Navarra (1.278 casos por 100.000 habitantes a 14 días), Asturias (1.205) o Galicia (1.182) son algunas de las regiones donde mayor número de contagios, y por tanto mayor incidencia, se está produciendo en mayores de 60 años. Debido a ello, comunidades como Asturias han recomendado a los ciudadanos que, pese a que la mascarilla ya no es obligatoria en muchos espacios, la sigan utilizando, sobre todo si son personas de riesgo o van a estar en contacto con personas vulnerables.
No obstante, si bien las camas ocupadas sí han aumentado en la última semana, la tasa de ocupación en las UCI es más baja que la semana pasada.
La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), lanzó una batería de recomendaciones, pidiendo "mantener la prudencia por la permanencia del riesgo epidemiológico elevado y la posibilidad de desarrollo de nuevas cepas", señalando también que todo aquel que tenga síntomas respiratorios debe llevar de forma obligatoria la mascarilla.
El virólogo Estanislao Nistal comentaba en una entrevista con Uppers que "todas las personas que tengan infecciones respiratorias, especialmente en los casos de gripe y SARS-CoV-2, deberían protegerse con mascarilla. En los momentos en los que la circulación de estos virus respiratorios sea alta, se debería de tener algunas precauciones con las personas de más riesgo".
Así, los expertos aluden a que en espacios muy cerrados o que tengan poca ventilación es importante que se mantenga la mascarilla para la contención del virus, aunque en esta nueva etapa de vuelta a la normalidad previa a marzo de 2020 la responsabilidad individual coge cada vez más importancia.