El endeudamiento de los hogares españoles presenta una curiosa paradoja. Mientras la instantánea general refleja los mejores datos de los últimos 22 años, el endeudamiento por créditos personales aumenta un 45% desde 2019, con gran impacto en las clases medias y, especialmente, en los uppers. Como cada semana en 'MoneyTalks', Javier Ruiz analiza una situación en la que cada vez se piden más créditos y mucho más caros.
Es cierto que muchos hogares con empleos estables han decidido que, dado que los tipos de interés están muy altos, era buen momento para saldar deudas o amortizar la hipoteca y no pedir préstamos, pero la clase media, y de ahí para abajo, pasa por verdaderos apuros económicos. Literalmente están endeudados hasta el cuello. Sobre todo los mayores de 55 años y con hijos en edad universitaria. Si la cifra de deuda promedio por créditos personales está en 28.415 euros, en los sénior asciende a 40.953 euros en deudas, según datos del Banco de España.
Y no solo aumenta el tamaño, también lo hacen los intereses de la deuda, que se han duplicado: del 2,3% en diciembre de 2021 ha saltado al 4,6% en noviembre de 2023. Mientras, el crédito nuevo está a más del 5%. Los créditos hipotecarios han pasado del 1,5% al 3,6%; para las empresas pedir un crédito también es más caro, ya que los intereses pasan del 3% al 5%; y en los créditos al consumo pasan del 6 al 8%.
Como consecuencia de estos créditos más caros también aumenta el estrés financiero de las familias, que dedican más del 40% de su renta a pagar sus deudas, con un índice que ha pasado del 10,5% en 2020 al 11,2% en el 2023. Por norma general, pagar la casa debería suponer como máximo el 30% de la renta, de modo que si se ganan 1.000 euros al mes la letra debería ser de 300 euros, y el resto dedicarlo a pagar facturas y comida. Por encima de esto se considera que hay estrés financiero o un hogar vulnerable, un umbral que, por flexibilizar, se está subiendo al 40%.
El número de hogares que se endeuda sube: si en abril era el 16,8% ahora ronda el 19,7%, lo que significa que uno de cada cinco se ha endeudado más. No es de extrañar que muchos caigan en las estafas de los créditos rápidos. Mucho cuidado con lo que se pone como aval -una casa, el coche- porque puedes perderlo. Y cuando no es así, los intereses que pueden cobrarte son disparatados, de auténtica usura. El crédito fácil no existe en economía. Todo cuesta. Si se necesita dinero, cualquier opción es preferible antes que una de estas casas de crédito rápido.
En cuanto a los tipos de interés, aunque no hay todavía fecha concreta para que las familias puedan empezar a ver cómo bajan, se espera que para mediados de año haya una clara relajación. ¿Y el riesgo de impago? Aunque los tipos se han disparado como lo han hecho, la tasa de morosidad solo ha subido una décima, al 3,2%. Todo el mundo tiende a pagar primero al Banco. Otra cosa distinta es la dudosidad, que es el indicador de los créditos que la banca no tiene claro si podrá recuperar, y esto sí esta subiendo. El futuro dependerá mucho del empleo. Si en los próximos meses hay algún susto en el mercado laboral, repercutirá directamente en la economía general.
Mientras, la banca sigue obteniendo resultados de récord. Santander ha anunciado beneficios superiores a los 11.00 millones de euros, BBVA también ha pulverizado su récord con más de 8.000 millones, y Sabadell ha hecho lo propio con ganancias de más de 1.300 millones. El conjunto de los cinco grandes bancos ha ganado cerca de 30.000 millones, una cifra con la que se podría pagar el presupuesto de Defensa durante los próximos 15 años. Y estos resultados van a continuar en 2024 porque los tipos van a seguir altos al menos seis meses más. Resulta hasta obsceno que se quejen por un impuesto extraordinario de 300 millones. Para saber más sobre el endeudamiento con créditos al consumo puedes ver la charla completa con Javier Ruiz en el vídeo.