Las hipotecas bajan significativamente, pero los precios de las viviendas, tanto en compra como en alquiler, no dejan de subir. En una nueva entrega de 'Money Talks' Javier Ruiz explica la razón de este incremento y qué medidas serían necesarias para normalizarlo.
Los que tengan una hipoteca o estén pensando en comprarse una casa están de enhorabuena: las hipotecas bajarán una media de 1.200 euros al año. De la misma manera, también bajarán los créditos al consumo. La cara B es que la bajada de tipos de interés hará que los bancos ofrezcan intereses más bajos a las cuentas de ahorro remuneradas, algo que no parece preocupar al experto. "Los bancos ya nos daban tan poco que, la verdad, da igual", asegura.
Tener una hipoteca es la fase final de algo que cada vez cuesta más. En los últimos años, encontrar una casa razonable a un precio razonable es misión imposible. ¿Qué razones hay para ello? "Lo primero es que hay mucha demanda y muy poca oferta. También hay un factor especulativo brutal. Hay grandes fondos que se están haciendo con viviendas para guardárselas para reventar el precio. Y lo tercero es que nos falta un parque de vivienda social. En España no hay las suficientes. En Austria, por ejemplo, gobernada por la ultraderecha, hay un 30% de vivienda social, 1 de cada 3 casas. Y cuando esto ocurre, los precios se estabilizan", señala el periodista.
Para conseguir una casa casi hay que pasar un casting por parte de inmobiliarias y caseros. No todos los actores del mercado de la vivienda se comportan mal, pero, como insiste Javier Ruiz, sí hay comportamientos de auténticos "buitres inmobiliarios", tal y como señala Ruiz.
Entre las prácticas ilegales, pedir varios meses de alquiler por adelantado o pedir el extracto bancario. Son prácticas invasivas a las que no deberíamos ceder, pese a que se están generalizando.
'Money Talks' también habla del fenómeno del alquiler por habitaciones. ¿Se puede regular? "Es muy difícil porque se trata de viviendas particulares. Un inspector no puede entrar en una casa a ver quién vive realmente ahí. No hay forma de controlarlo", afirma. La práctica no solo es legal, sino que está permitiendo a los propietarios cambiar el contrato cada vez que un inquilino se va y subir el precio, pese a que la ley impone cambiar el IPC únicamente a fin de año. "Todo esto está convirtiendo en una jungla el mercado inmobiliario", asegura Javier Ruiz antes de compartir un dato: el alquiler por habitaciones ha subido más del 50% en un año.
Necesitamos un parque de más de 500.000 viviendas anuales para poder empezar a vislumbrar una solución a la falta de vivienda. "El drama es que tenemos un problema hoy que no va a solucionarse hasta dentro de unos años porque si hoy empezamos a construir, que no se está haciendo, hasta dos o tres años no hay casas", afirma Ruiz.
La única salida para el experto es articular un pacto de estado sobre la vivienda. "Es hora de que tengamos conversaciones de mayores. Necesitamos el consenso del gobierno central y del gobierno autonómico. No se puede jugar al boicot porque la factura la pagamos nosotros. No podemos perder más tiempo porque estamos perdiendo una generación. Hay que construir vivienda a lo bestia y dejar de tirarnos el ladrillo a la cabeza", concluye.