Javier Ruiz, sobre la exención de impuestos a los menores de 26 años: "Se abre la puja por el talento joven"

"Este es un debate para los que tienen hijos: ¡agarránse que vienen curvas!". Javier Ruiz se lanza así a analizar en una nueva entrega de Moneytalks lo que llama "una de las noticias económicas más sexies de los últimos años". El gobierno de Portugal acaba de anunciar la exención de impuestos para los jóvenes menores de 26 años y las reacciones no se han hecho esperar.

Experimento fiscal

La medida consiste en una reducción gradual de impuestos a lo largo de un periodo de ocho años, entre los 18 y los 26 años. En el primer año, hay exención total y después, progresivamente, se van recuperando las tasas impositivas, del 75 al 25% del último año.

Como explica el periodista, Portugal tiene la tasa de emigración juvenil más alta de Europa. El país luso, como otros de su entorno, ve cómo sus jóvenes, una vez formados y cuando empiezan a ser 'rentables' (comienzan a trabajar y a pagar sus impuestos), se van fuera en busca de sueldos más altos. "Lo que está haciendo Portugal es decir 'no te puedo pagar mucho dinero, pero puedo hacer que no pagues impuestos'. Está diciendo 'soy un paraíso fiscal juvenil'. Se abre así la puja por el talento joven y la caja de Pandora de la fiscalidad en Europa", asegura Javier Ruiz, para quien la medida no es mero brindis al sol: "El gobierno lo ha incluido en los presupuestos generales del estado y ha cuantificado lo que deja de recaudar: 650 millones de euros. Esta medida no es ninguna ocurrencia".

¿Es justo?

La medida es polémica porque plantea algunas dudas. La primera es si no impacta en toda la línea de flotación del sistema fiscal. "Los impuestos no se pagan por tramos de edad, sino por niveles de ingreso. Hacer este tipo reducciones puede suponer una discriminación por tramos de población", explica Ruiz. La otra es si se le puede dar el mismo trato fiscal a rentas diferentes solo porque comparten edad: "¿Podemos dar los mismos beneficios fiscales a un joven cualificado que gana 80.000 euros en su primer puesto de trabajo y a otro que apenas llega a 20.000?".

Por estas razones, la exención fiscal ya ha empezado a matizarse para aplicarse a las rentas inferiores a los 28.000 euros al año.

La generación estafada

Pero para Javier Ruiz el gran peligro de esta medida no está solo en las discriminaciones fiscales, sino en crear una generación que no crea en los impuestos. "Puede ocurrir que estos jóvenes no valoren el papel de los impuestos y que ocurra eso que se llama 'minar la moral fiscal', como ya hacen algunos partidos políticos que restan valor a lo público", advierte el periodista.

Aún así, existe, en su opinión, un riesgo mayor: "Perder a toda una generación. Los jóvenes de hoy se han formado, han estudiado, han aprendido idiomas, son los más preparados de la historia. Han cumplicado con su contrato social. Y, sin embargo, no los compensamos. Son una generación estafada".