Bio
Me consideran buena persona y yo, con eso, ya soy feliz. Porque es algo que, además de darte puntos de karma, me sirve, y mucho, para mi profesión. Lo decía Kapuściński: "Para ejercer el periodismo, ante todo, hay que ser buenos seres humanos. Las malas personas no pueden ser buenos periodistas. Si se es una buena persona se puede intentar comprender a los demás, sus intenciones, su fe, sus intereses, sus dificultades, sus tragedias". Poco más que añadir.